MANCHA REAL (JAÉN), 17 (EUROPA PRESS)
La consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha colocado la primera piedra del nuevo centro de salud de la localidad en el solar que se encuentra entre las calles Córdoba y Virgen de la Capilla. Las nuevas instalaciones, con un presupuesto de 5,4 millones de euros vendrán a triplicar la superficie del centro actual y las obras tendrán un periodo de ejecución de catorce meses.
El acto ha contado con la participación de los escolares del CEIP San Marcos de la localidad, unos 25 niños de entre 10 y 11 años que, a través de una iniciativa de la enfermera referente escolar, Ana Moreno, y de la misma dirección del distrito, han insertado en la urna deseos para el nuevo centro de salud y sus profesionales.
García ha apuntado que la redacción del proyecto se adjudicó finalmente por 368.879 euros y la inversión para su construcción será de 5,4 millones de euros. “Son más de cinco millones de euros los que la Consejería de Salud y Consumo va a invertir en este municipio apostando por la mejora de las infraestructuras sanitarias”, ha dicho la consejera.
El nuevo centro de salud contará con dos servicios “totalmente independientes pero interconectados” como son el Servicio de Urgencias de Atención Primaria y el centro de salud con el resto de dependencias. También incorporará una nueva área de Radiología de forma que se evitarán los desplazamientos a la capital y, además, Atención Primaria contará con una consulta para un psicólogo, un proyecto que acaba de ponerse en marcha para lograr un acercamiento a la ciudadanía.
Además, habrá dos circuitos totalmente independientes, el circuito de adultos y el circuito pediátrico que tendrá una sala de espera y una sala de juegos para los menores que acudan a consulta con sus padres.
Las consultas están dimensionadas en metros cuadrados según las necesidades planteadas por los profesionales y estarán todas pareadas. “Esta disposición favorece que no haya una sala de servicios comunes, sino que cuando el paciente es atendido por el médico pasa directamente a la habitación contigua donde lo atiende el enfermero que tiene el mismo cupo de pacientes que el médico, siendo una atención más personalizada y eficaz”, ha resaltado la consejera.
Catalina García ha recordado que el actual centro de salud de Mancha Real cuenta con “un espacio insuficiente e inadecuado” ya que se diseñó hace más de 40 años para cuatro cupos de medicina, enfermería y un pediatra. Sin embargo, actualmente hay siete cupos de medicina y enfermería, enfermera referente escolar y enfermera de consulta de acogida junto a dos pediatras, un trabajador social, enfermera especialista en ginecología y obstetricia y profesionales de la salud pública, enfermería de gestión de casos, rehabilitación y otros profesionales no sanitarios.
“Esta situación dificulta unas buenas condiciones para desarrollar la prestación sanitaria ya que la distribución de espacio tampoco se adecua a las necesidades funcionales de un centro de salud”, ha señalado.
El nuevo centro de salud supone ampliar el espacio hasta 3.144 metros cuadrados, triplicando la superficie aprovechada actualmente además de contar con distintas instalaciones que, “hasta este momento, no han tenido los profesionales, lo que va a venir a favorecer sus condiciones laborales”.
Así se ha referido a la nueva sala de fisioterapia de 82 metros cuadrados, sala de reuniones de 36 metros cuadrados y aula de docencia de 40 metros cuadrados, junto con despachos para distintos profesionales como trabajador social o enfermera gestora de casos o el Área de Personal.
“El nuevo centro de salud de Mancha Real es una clara apuesta por ejecutar edificios de altas prestaciones y muy alta eficiencia energética”, ha añadido la titular de Salud y Consumo. Para lograrlo, se ha partido desde el inicio adoptando metodología BIM, creando un gemelo digital, tecnología que permite anticiparse a posibles imprevistos durante la ejecución de las obras, “permitiendo realizar obras más rápidas, mejor organizadas y con desviaciones presupuestarias casi nulas”.
Asimismo, ha explicado la consejera, dada la necesidad de poner en marcha las instalaciones a la mayor brevedad posible, se han adoptado soluciones constructivas prefabricadas y del tipo construcción en seco, que permiten reducir el tiempo de ejecución en un 40 por ciento respecto a las técnicas tradicionales, para ello se ha optado por un sistema de estructura prefabricada de hormigón, que permite ejecutar la misma en un plazo máximo de dos meses.
Por otro lado, se ha proyectado un sistema de cubierta/fachada de panel sándwich in situ, con un aislamiento de 20 centímetros que arroja unos niveles de transmitancia “realmente bajos”. Finalmente, las instalaciones de ventilación y climatización son de alta eficiencia, utilizando sistemas de recuperación de calor. Todo ello se complementa con una instalación de placas fotovoltaicas con más de 70.000 W instalados, que podrá llegar a cubrir cerca del 50 por ciento de la demanda energética del edificio.
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