JAÉN, 17 (EUROPA PRESS)
Asaja-Andalucía, COAG-Andalucía y Cooperativas Agro-alimentarias de Andalucía quieren han mostrado su apoyo a la candidatura a Patrimonio Mundial de los Paisajes del Olivar de Andalucía, siempre que se rechace la inscripción de 144.000 hectáreas de olivar en el catálogo general del Patrimonio Histórico Andaluz porque ello conllevaría “limitaciones a la capacidad productiva del olivar protegido”.
Las tres organizaciones han apuntado en un comunicado que “la línea roja” siempre ha sido la propiedad y que “no hubiera limitaciones a la capacidad productiva del olivar protegido”. Así, aseguran que “ha ido quedando patente en las diversas reuniones durante todos estos años”, e incluso se recogía en los documentos que se presentaron para las Adhesiones a la Declaración de los Paisajes del Olivar de Andalucía de finales del año 2017 y principios del año 2018.
Sin embargo, apuntan que la última versión del expediente “contradice claramente dicha afirmación”, por lo que las organizaciones firmantes quieren resolver todas las dudas surgidas tras conocer el citado documento con la única intención de “salvaguardar los intereses del sector productor, principal avalista del paisaje del olivar andaluz”.
Aseguran que en todas las reuniones que se han ido sucediendo “no se ha hablado de nada de las limitaciones que ahora, después de siete años, se dan a conocer”. Afirman que no es hasta el 20 de diciembre de 2022 cuando se informa de estas restricciones, con las que “tanto el derecho de propiedad como la propia libertad de empresa se verían seriamente afectados, sin que se concreten cuáles serán las supuestas ventajas para los agricultores, ganaderos y propietarios que entrañaría la declaración de Patrimonio Mundial”.
“Hasta el momento, se desconoce el presupuesto asignado, así como la procedencia del mismo. Además, se habla de posibles ayudas y subvenciones a los propietarios afectados pero no se detallan ni evalúan económicamente las mismas”, dice el escrito.
Sostienen que según sus estudios técnicos, esta figura provocaría limitaciones y obligaciones a los agricultores, ganaderos y propietarios del territorio afectado, mientras que las ventajas “no quedan nada claras”.
Por eso, Asaja, COAG y Cooperativas Agro-alimentarias han planteado, por un lado, la necesidad de una reunión técnica donde se expongan todas las consecuencias que tiene esta declaración para los olivareros afectados y, si los hay, se cuantifique los beneficios que puedan suponer para ellos. Y, por otro lado, que se hagan reuniones en las zonas afectadas para que sean los propios olivareros los que sepan de primera mano las consecuencias y se manifiesten al respecto, ya que la caracterización de estos olivares no sólo afectará a la provincia de Jaén, sino también a zonas de Córdoba, Sevilla, Granada, Málaga y Cádiz.
Por ello insisten en que no se opondrán a la candidatura a Patrimonio Mundial de los Paisajes del Olivar de Andalucía, “siempre y cuando no conlleve la inclusión de 144.000 hectáreas de olivar en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz”.
En este sentido, consideran innecesario imponer restricciones y limitaciones a un sector productivo como el olivar para favorecer los intereses de otros sectores como el turístico, y menos “bajo el pretexto de conservar un paisaje y una cultura por la que ya velan sus legítimos propietarios en virtud de su función primera y esencial, la obtención de la aceituna de la mejor calidad para la producción de aceite o para su transformación en aceituna de mesa”.
- Te recomendamos -