JAÉN, 8 (EUROPA PRESS)
El consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública de la Junta de Andalucía, José Antonio Nieto, ha valorado la labor de los centros de menores infractores (CIMI) como “una inversión social importantísima”, ya que permite “recuperar a los más jóvenes que todavía tienen mucho que aportar y que desgraciadamente han tenido un contratiempo en su vida que les ha hecho cometer un delito”.
Así lo ha señalado en la visita que ha realizado este miércoles al CIMI Las Lagunillas de Jaén, gestionado por la Fundación Diagrama, para participar en un acto de reconocimiento a los responsables del programa Naturae.
Se trata de una iniciativa de voluntariado ambiental que se incorpora en la reeducación de los menores infractores y fue galardonada el pasado 16 de febrero con el Premio Andalucía de Medio Ambiente que concede la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul.
El consejero ha felicitado a la directora del centro, Ana Belén Rivero, y a los dos educadores especialmente centrados en el programa, Antonio Santos Torres y Amador Fernández Torres, a quienes ha agradecido su trabajo y su “implicación”. Además, se ha dirigido a los jóvenes para alabar su compromiso y sus ganas de corregir su conducta y reorientar sus vidas.
Al acto han asistido también la viceconsejera, Ana Corredera; el director general de Justicia Juvenil y Cooperación, Esteban Rondón; el delegado del Gobierno de la Junta en Jaén, Jesús Estrella; los delegados territoriales de Sostenibilidad y Justicia, María José Lara y Javier Carazo, respectivamente; así como la fiscal jefe, Pilar Sánchez, y la jueza de Menores, María Teresa Carrasco.
Nieto ha subrayado que los CIMI “cumplen un papel fundamental en la recuperación de chavales que han tenido algún tipo de problema”, por lo que se trata de un “recurso necesario” en el que “no se gasta dinero, se invierte en mejorar la sociedad”.
“Tenemos la obligación de tener a los mejores profesionales y las mejores condiciones”, ha defendido, tras poner en valor el “mérito del trabajo” que se realiza en estos centros.
80% DE REINSERCIÓN PLENA
Prueba de ello, según ha resaltado, es que la reinserción es plena en el 80 por ciento de los casos y parcial en otro diez por ciento, de forma que, aunque los menores vuelvan a cometer algún tipo de conducta que merezca reproche penal, suele ser de tipo leve. Por ello, ha incidido en que se trata de un recurso del que “sentirse orgullosos”.
En el caso de Las Lagunillas, ha alabado la apuesta por el programa Naturae, que “inculca valores como el cuidado de la naturaleza y el entorno, el trabajo en equipo”. Junto a ello, permite dotar a los jóvenes de una experiencia y una formación que les abre posibilidades laborales al salir del centro una vez cumplida la medida impuesta por los jueces.
El programa Naturae se puso en marcha en 2017 para incluir el voluntariado ambiental en el proyecto de reeducación de los menores infractores mediante la colaboración con ayuntamientos, organizaciones ecologistas, asociaciones vecinales y entidades sociales.
En estos años, 468 jóvenes han participado en actividades como la cría de aves en el Centro de Recuperación de Especias Amenazadas (CREA) Quiebrajano, la restauración de las zonas afectadas por el incendio de 2015 en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas o la limpieza de ríos con el Programa Andarríos.
También han participado en la señalización de senderos del Camino de Santiago, la reforestación y riego del entorno del Castillo de Santa Catalina con la Asociación de Vecinos El Almendral, la reparación de cercados y refugios en los parques naturales de Despeñaperros y Sierra Mágina, talleres de reciclaje, charlas de concienciación, rutas y actividades al aire libre.
ILUSIÓN
Por su parte, la directora del centro ha reconocido que el premio ha sido recibido “con mucha ilusión”, tanto por los profesionales como por los jóvenes. Según ha explicado, con el voluntariado ambiental han trabajado con los menores “cómo emplear el tiempo libre, que es muchas veces lo que les ha traído aquí, descubrir emociones, intereses e inquietudes, desarrollar valores”.
Igualmente, esta iniciativa sirve, incluso, para “abrir vías para la inserción laboral”, ya que el uno de los títulos de FP que tiene certificado el CIMI jienennse y que pueden estudiar los menores es de Jardines y Viveros.
En la actualidad, hay 32 menores cumpliendo medidas en Las Lagunillas. Rivero ha detallado que el trabajo que se realiza con ellos es “muy individualizado” y requiere intervenir también en el entorno familiar y educativo ya que “en la reinserción influyen muchos factores”.
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