HUELVA, 7 (EUROPA PRESS)
La Delegación Territorial de Turismo, Cultura y Deporte en Huelva ha licitado por casi 80.000 euros el contrato del servicio técnico para el inventariado, selección y catalogación de fondos arqueológicos del Museo Provincial –publicado hasta el día 10 de mayo– al tener previsto “en un cercano espacio de tiempo” la reordenación de sus fondos de arqueología “por estar llamado a ser en su totalidad Museo Arqueológico, una vez se traslade la colección de Bellas Artes al edificio del Banco de España que se encuentra en obras de rehabilitación en la actualidad”.
Así lo indica la Delegación en el pliego de prescripciones técnicas de la licitación, consultado por Europa Press, que señala que objeto del pliego es establecer las condiciones técnicas particulares que han de regir la contratación del servicio de inventario, selección, catalogación y ordenación de las colecciones patrimoniales arqueológicas y numismáticas del Museo de Huelva de las piezas que se encuentran en las dependencias del sótano de la Alameda Sundheim.
Continúa indicando que las colecciones objeto de los trabajos serán de naturaleza arqueológica, numismática, de material metálico, pétreo y cerámico, fundamentalmente, además de “un nutrido grupo de piezas de otras naturalezas, de formato pequeño y medio en su mayoría”, así como “todas aquellas actuaciones complementarias que fuesen necesarias para su realización, quedando obligada la empresa adjudicataria a realizar los trabajos contratados según las especificaciones de índole técnica” que especifica la Junta.
Asimismo, especifica que los trabajos, que tendrán una duración de seis meses, se realizan en las dependencias del Museo y que para el desarrollo y obtención de los resultados se precisaran de los medios técnicos, materiales y profesionales que se detallan, como son tres arqueólogos con experiencia en actividades arqueológicas o trabajos de manipulación y documentación de colecciones museísticas, así como un arqueólogo con formación en numismática con “una contrastada experiencia en clasificación y estudio de material numismático”.
El personal designado por la empresa adjudicataria desarrollará sus funciones bajo las instrucciones, coordinación y supervisión del equipo técnico del museo (Dirección, conservador y arqueólogo), las labores de inventario de las colecciones albergadas en el sótano interior del Museo, inventario de las colecciones albergadas en el compacto del sótano exterior, rellenado de la tabla de registro e Inventario facilitada por el Museo o inventariado singularizado de las colecciones que pueden albergar elementos museables procedentes de diversas intervenciones realizadas en la provincia, entre otras.
Por otra parte, indica que el Museo de Huelva suministrará los contenedores, suministros y materiales de embalaje, amortiguación y documentación necesarios para el desempeño de las tareas, “siendo responsable la empresa adjudicataria de aportar el resto de material necesario para la realización de estos servicios”.
Todo esto, según señala la Delegación en el pliego, ya que el Museo Provincial tiene previsto “en un cercano espacio de tiempo” la reordenación de sus fondos de arqueología por “estar llamado a ser en su totalidad Museo Arqueológico, una vez se traslade la colección de Bellas Artes al edificio del Banco de España que se encuentra en obras de rehabilitación en la actualidad”.
De este modo, detalla que el nuevo discurso museístico “obligará a una progresiva reestructuración de las zonas de almacenaje”, así como que “se trata de una ingente cantidad de bienes patrimoniales, declarados en su totalidad Bienes de Interés Cultural (BIC), que concretamente asciende a un número superior a 100.000 registros de bienes arqueológicos de diverso formato, peso y naturaleza, entre los que se debe referenciar la presencia de la colección numismática del Museo de Huelva, dada la propia especificidad de dichos bienes”.
CRECIMIENTO “EXPONENCIAL DE FONDOS”
A este respecto, la Delegación reseña que el crecimiento “exponencial” de fondos desde la asunción de competencias por la Comunidad Autónoma, así como “el propio modelo de gestión de las actividades arqueológicas en los últimos 35 años, ha sido la consecuencia inevitable de este aumento exponencial de fondos y en consecuencia de los bienes patrimoniales acumulados y en parte no debidamente conocidos y analizados, sobre el estado de la cuestión y panorama de la arqueología provincial, cuyo contenido es preciso reconocer e inventariar adecuadamente”.
Todo ello “hace inevitable e improrrogable” que se acceda a ese registro “con grados de conocimiento diferenciado” de las colecciones que se custodian y, en consecuencia, que “sea en primer lugar necesaria la normalización del inventario, la revisión y puesta al día del registro e inventario de las colecciones del inventario y selección del conjunto de bienes arqueológicos que engrosan la parte de la colección del museo, y sean museables”.
Estos bienes se albergan en el actual sótano del edificio de la institución museística, en la sección de reservas selectas y se valora inicialmente en un total de más de 100.000 unidades de registro, –piezas sueltas o lotes de piezas–, que se encuentran albergadas en tres estancias distintas del sótano del edificio, asumiendo por ello en esta fase de trabajo en concreto, aquellos que se custodian en una sola estancia, el sótano de reservas internas del edificio principal de la colección en la Alameda Sundheim.
La Delegación señala en el pliego que en esta zona, “se encuentran, por cierto, las piezas de mayor relevancia patrimonial y por ende con mayores posibilidades de musealización para formar parte del discurso expositivo de la nueva institución”.
Por ello, “como apoyo efectivo al contingente de los técnicos profesionales arqueólogos para compensar la falta de información sobre los Bienes Arqueológicos” que se custodian –procedencias, número de inventario, ausencia de referencias, etc.– así como “la falta de control, gestión, sistematización” de la información generada o no sobre los Bienes Muebles que “se hace preciso inventariar, referenciar, ordenar y registrar fotográficamente, seria necesario complementarlo con diverso material inventariable y fungible preciso para la correcta prestación de los servicios que se demandan”.
“Y que, en consecuencia, beneficiaran considerablemente estos trabajos de sistematización e inventario de fondos arqueológicos, a su ordenación, futura catalogación, así como a la propia conservación de los mismos, para la contingencia y preservación en su almacenaje en condiciones adecuadas, dado el elevado número de piezas que componen las colecciones a tratar, así como para los previsibles trabajos de traslado o musealización de cara a un nuevo Proyecto Museológico del Museo”, subraya el pliego.
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