HUELVA, 31 (EUROPA PRESS)
La Junta de Andalucía atendió en 2023 a través de su Servicio de Asistencia a Víctimas de Andalucía (SAVA) a 1.555 personas e instituciones en Huelva, la mayoría mujeres, de entre 30 y 44 años, solteras y residentes fuera de la capital. El 41,6% de las personas usuarias, 648, eran mujeres víctimas de violencia de género.
Los SAVA, gestionados por la Consejería de Justicia, Administración Local y Función Pública, se ubican en las principales sedes judiciales de las capitales andaluzas, si bien desde la pasada legislatura cuentan con equipos itinerantes para acercar la atención a las víctimas del medio rural.
La delegada territorial de Justicia, Administración Local y Función Pública, Carmen Céspedes, ha puesto en valor que “gracias a los SAVA itinerantes se ha duplicado el número de usuarios y en el último año son más las personas atendidas residentes en un municipio de la provincia que las de Huelva capital”.
Céspedes ha destacado la “profesionalidad y el compromiso de los juristas, psicólogos y trabajadores sociales que trabajan en el SAVA, todos ellos con formación en violencia de género”. Su ámbito de aplicación se extiende a todas las víctimas de delito cometido en España o que pueda ser perseguido en España, con independencia de su nacionalidad, de si son mayores o menores de edad o de si disfrutan o no de residencia legal.
El 76,8% de los usuarios atendidos en Huelva son mujeres (1.195). En 2023, recibieron asistencia por parte del SAVA 172 menores, también en este caso mayoritariamente niñas víctimas de delitos cometidos en el 40% de los casos por un conocido.
Una misma persona recibe atención integral por lo que el número de actuaciones realizadas el año pasado fue de 7.104, en concreto 1.843 actuaciones del ámbito jurídico, 714 de tipo social, 882 psicológicas y 3.665 generales.
Aunque el SAVA atiende a víctimas de todo tipo de delitos, casi el 42% los usuarios que han pasado por estos servicios han acudido o han sido derivados por delitos relacionados con la violencia de género y el 84,75% han denunciado.
“Para mejorar la coordinación con los servicios de Instituto Andaluz de la Mujer, hace un año las consejerías de Justicia e Igualdad firmaron un protocolo para garantizar el intercambio de información y crear una figura de referencia para la víctima, que hace de enlace entre el personal participante en su proceso, tanto si la denuncia llega a judicializarse como si no, y facilitar a la víctima el asesoramiento y orientación acerca del sistema judicial y de la red de recursos asistenciales existentes”, ha explicado la delegada.
En función de la urgencia y riesgo para las víctimas, se diseña un Plan de Asistencia Individualizada desde un punto de vista multidisciplinar y multisectorial.
En general, los delitos más habituales de todas las víctimas atendidas en el SAVA son los de torturas y contra la integridad moral (38,14%), contra la libertad (17,29%) y lesiones (16,08%). El 58,3% ha sufrido delitos continuados.
El SAVA también ha asistido a 108 mujeres con discapacidad, más de la mitad mayores de 45 años. En el 41,67% de los casos el victimario era su hijo y en un 25% su progenitor.
Céspedes ha subrayado que en el caso de los 172 menores atendidos, en un 40% el victimario era un conocido, en un 26,67% un vecino y “en otro 26,67% su padre o su madre, una cifra que resulta escalofriante”.
Aunque la mayoría de las personas atendidas son andaluzas, en 2023 han pasado por los equipos del SAVA de Huelva 188 inmigrantes, principalmente mujeres de origen marroquí (43,62%).
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