![epress_20250217152719.jpg](https://www.noticiasde.es/wp-content/uploads/2025/02/epress_20250217152719-640x480.jpg)
ASTUDILLO/HUELVA, 17 (EUROPA PRESS)
Dos linces ibéricos criados en el centro El Acebuche, en Doñana, (Huelva), gestionado por el Organismo Autónomo Parques Nacionales (OAPN), han sido liberados este lunes para su reintroducción en Astudillo (Palencia). De esta forma, cincuenta años después esta especie ha vuelto al cerrato palentino con la suelta de ‘Virgo’ y ‘Vuelvepiedras’, en un acto que ha contado con la presencia del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán.
Se trata de los dos primeros linces, macho y hembra que pueblan esta zona de la provincia de Palencia, que han sido liberados en un cercado de adaptación, pero la previsión de la Junta es poner en libertad a otros cuatro más a través de su reintegración en la naturaleza a lo largo de este año.
“Este proyecto generará empleo, fomentará el turismo de naturaleza y promoverá actividades económicas vinculadas al medioambiente; además, contribuirá a posicionar a Castilla y León como un destino sostenible de primer orden”, ha asegurado Alfonso Fernández Mañueco, quien reiterado su compromiso “con la recuperación y conservación de especies para proteger el medioambiente y contribuir al desarrollo económico y social” de la Comunidad.
Asimismo, Fernández Mañueco ha indicado que la Junta ha invertido casi dos millones de euros, principalmente en infraestructuras, equipos técnicos y materiales, con el objetivo “es proporcionar al lince ibérico un entorno adecuado para su supervivencia” en la Comunidad.
Además, desde el Gobierno autonómico está realizando todos los estudios técnicos previos para reintroducir esta especie en zonas ecológicas y socialmente viables en la Comunidad, para lo que está buscando también financiación de los Fondos Next Generation de la Unión Europea.
El presidente de la Junta ha señalado que el lince ibérico “es un símbolo” de la fauna de Castilla y León y es “un orgullo” que vuelva a la Comunidad por todo lo que representa.
“Este felino es un aliado de la agricultura, ya que ayuda a controlar la sobrepoblación de conejos que dañan los cultivos. También es compatible con la ganadería extensiva, ya que es un eficaz controlador de la densidad de distintos depredadores y potencia la caza menor de mustélidos como el hurón y la comadreja, mejorando las poblaciones de perdiz”, ha señalado Fernández Mañueco.
Por su parte, el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, ha aseverado que el lince “es una especie que se ha convertido en un emblema: cuando una sociedad quiere, puede”, a lo que ha añadido que ha estado “al borde de la extinción y recientemente ha dejado de considerarse ‘en riesgo”.
Y aunque no ha recuperado “el esplendor que debería”, con la suelta de estos dos ejemplares en la Comunidad “se da un paso más en esa dirección”.
DISTRIBUCIÓN TERRITORIAL
En la reunión del Grupo de Trabajo del lince ibérico, celebrada el 31 de octubre del año pasado, se acordó la distribución de los ejemplares nacidos en los centros de cría en 2024. De los 33 ejemplares nacidos, se liberarán al medio natural 21 ejemplares y dos cachorros procedentes de campo (ejemplares huérfanos). De estos 23, seis se distribuirán en Castilla y León, en la nueva zona de reintroducción del Cerrato Palentino. Cuatro proceden de los centros de cría de OAPN y dos de Portugal.
Además de estos, se distribuirán cinco ejemplares en Castilla-La Mancha, para la nueva zona de reintroducción de La Veguilla y Sierra Jarameña (Cuenca); cinco ejemplares en la Región de Murcia, asignados a la zona de reintroducción de Tierras Altas de Lorca; cinco ejemplares en Andalucía, en su área de reintroducción de Sierra Arana, y dos ejemplares en Extremadura.
Los trabajos de censo de lince ibérico (Lynx pardinus) en España y Portugal acometidos durante 2023 han evidenciado que la especie ha superado la barrera de los 2.000 ejemplares, constituyendo un nuevo número máximo desde que se realiza un seguimiento pormenorizado de sus poblaciones. La población de lince continúa expandiéndose, tanto numérica como territorialmente: ya son 14 las áreas geográficas distintas donde la especie se reproduce y hay nuevas zonas de presencia estable en la Región de Murcia y en las provincias de Albacete, Badajoz, Toledo y Ciudad Real.
La tendencia de la población es “positiva y continua” desde 2015, lo que permite seguir siendo optimista por la reducción del riesgo de extinción del lince ibérico que supone. En un período de alrededor de 20 años, la población ha pasado de menos de 100 ejemplares contabilizados en 2002 a más de 2.000 en 2023. Y en los últimos años el incremento es aún más destacable, puesto que en 2020 la población total era de 1.111 linces y tres años más tarde se han añadido casi 900 individuos más a la población ibérica.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), a través del OAPN, gestiona dos centros de cría en cautividad de lince ibérico: el de Zarza de Granadilla, en Cáceres, y el de El Acebuche, en Huelva. Actualmente, los dos centros suman un total de 67 ejemplares. De los 33 ejemplares nacidos en 2024, 12 se quedan bajo la gestión del OAPN en los centros de cría: nueve en El Acebuche y tres en Zarza de Granadilla.
- Te recomendamos -