GRANADA, 3 (EUROPA PRESS)
El Infoca ha realizado este pasado 2024, en concreto a mediados de diciembre, tres quemas prescritas que han afectado a unas 16 hectáreas del entorno de Padul, en el Valle de Lecrín, en la provincia de Granada, como continuación de las que llevó a cabo el año anterior en otras 20 hectáreas con el objetivo final de recuperar el hábitat natural de la alondra ricotí.
Así lo ha indicado a Europa Press el director del Centro Operativo Provincial (COP) del Infoca en Granada, Antonio Anguita, que ha señalado que se prevé continuar con estos trabajos en 2025, nuevamente en las semanas del final del otoño. En este pasado diciembre se realizaron el jueves 12, el viernes 13 y el lunes siguiente, en las tres ocasiones con dos retenes de bomberos y dos camiones autobomba por seguridad.
Los resultados de estas quemas prescritas promovidas desde Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta están siendo “positivos” por la facilidades que procuran para que el pastizal brote y esos brotes verdes sirvan a su vez para que pueda pastar el ganado, ha apuntado Anguita.
Según señalaba el pasado diciembre el Servicio de Extinción de Incendios Forestales de Andalucía en un mensaje en su perfil de la red social X, consultado por Europa Press, en el que pedía a la ciudadanía no alertarse en caso de que tuviera conocimiento el jueves 12 de la primera de estas quemas prescritas de 2024, que finalizaba en torno al mediodía, se trataba de “crear claros en la vegetación y que pueda nidificar” la alondra.
Unos trabajos que continuaron en una parcela de unas 16 hectáreas, al modo en que se trabajó en otras quemas controladas realizadas en otros parajes de Andalucía como el de Doñana, en la provincia de Huelva, buscando en último término que la retirada del matorral envejecido, y por tanto “no productivo”, permita la regeneración del terreno, según explicaron fuentes consultadas por Europa Press en el Infoca.
La quema prescrita afecta a pastizales en los que apenas hay ganado por lo que, al no ser productivos, ponen en riesgo las condiciones para la reproducción de esta especie amenazada, detalló Anguita, que añadió que se interviene antes de enero, que es cuando comienza el periodo de celo de la alondra ricotí.
A finales de diciembre de 2023, la Junta informó de la finalización de cuatro quemas prescritas llevadas a cabo ese año en los terrenos de esta reserva ecológica de la alondra ricotí en término de Padul.
La alondra ricotí es un ave que nidifica en el suelo, y necesita zonas muy despejadas de vegetación con grandes claros, siendo una de las mayores amenazas sobre la población la matorralización del monte, es decir, el crecimiento excesivo de la vegetación por la falta de manejo tradicional del terreno, como el pastoreo extensivo, la recogida de esparto o la recolección de aromáticas.
Es una situación que llevó a la falta de escucha del canto de esta especie en los censos realizados por el personal técnico de la Consejería de Sostenibilidad, por lo que se optó por “una solución extrema de intentar recuperar el hábitat a través de estas quemas prescritas” que tienen su continuación este diciembre.
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