GRANADA, 27 (EUROPA PRESS)
La Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente está llevando a cabo un proyecto de recuperación forestal en el Parque Natural Sierra de Baza (Granada), con una inversión superior a 2,2 millones de euros y el objetivo fundamental de recuperar el potencial forestal de los montes afectados por el episodio de decaimiento forestal detectado en 2016.
El delegado del ramo en Granada, Manuel Francisco García, junto con los alcaldes de Baza y Gor, Pedro Justo Ramos y Ambrosio Molina, ha visitado las obras de tratamientos selvícolas que se están desarrollando en los montes públicos Sierra de Baza y Monte de Gor, ambos integrados en el Parque Natural.
Durante su visita, el delegado territorial ha destacado que este proyecto representa una acción clave para preservar y restaurar uno de los ecosistemas más valiosos de Andalucía.
“La Consejería tiene como objetivos principales del proyecto mantener una densidad adecuada de pies de pino negral, pino laricio y pino silvestre, en aquellas zonas donde presentan una elevada densidad, eliminar los árboles secos o debilitados para evitar la expansión de plagas y potenciar la regeneración del encinar, donde ya esté presente en mayor o menor grado”, ha explicado García, quien también ha subrayado que estas medidas permitirán acelerar la gestión adaptativa de la vegetación, favoreciendo el desarrollo del encinar en condiciones que le permitan reemplazar progresivamente a los pinares debilitados.
El proyecto, con un plazo de ejecución previsto hasta junio de 2025, contempla actuaciones en una superficie total de 1.840 hectáreas, de las cuales 1.761 corresponden al Monte Público Sierras de Baza y 79 hectáreas al Monte Público de Gor. Las zonas objeto de intervención corresponden principalmente a repoblaciones realizadas en las décadas de 1960, cuyo objetivo era generar una cubierta protectora frente a la erosión en un entorno que había sufrido un uso intensivo.
DECAIMIENTO FORESTAL
El episodio de decaimiento forestal que afecta a los pinares del Parque Natural Sierra de Baza tiene su origen en varios factores combinados, entre ellos los efectos del cambio climático. Desde la época en que se llevaron a cabo las repoblaciones, la temperatura media de la zona ha aumentado en 1,5 grados centígrados mientras que las precipitaciones estivales han disminuido significativamente.
Este cambio en el patrón climático ha generado un elevado estrés hídrico en los árboles, debilitándolos y haciéndolos más vulnerables a plagas y enfermedades. En este contexto, el estado de debilidad del arbolado ha propiciado la proliferación de insectos perforadores, como barrenillos y cochinillas, que afectan gravemente a las masas forestales.
La situación se agrava por el riesgo de que estas plagas se extiendan a áreas de pinar que aún no presentan síntomas severos de decaimiento, aumentando considerablemente el área afectada si no se implementan medidas correctoras de manera inmediata.
El proyecto en ejecución, denominado ‘Actuaciones de tratamientos sobre masas forestales para la lucha contra los efectos del decaimiento en la Sierra de Baza’, se basa en las directrices elaboradas por el grupo de trabajo técnico vinculado a la problemática del decaimiento de repoblaciones de pinar en Andalucía.
Este grupo ha recabado información exhaustiva sobre las causas y soluciones para abordar este fenómeno, permitiendo diseñar un plan de acción adaptado a las necesidades específicas del Parque Natural Sierra de Baza.
Entre las medidas incluidas en el proyecto destacan las actuaciones de tratamientos selvícolas, donde se persigue la eliminación de los árboles secos, debilitados o afectados por muérdago y cochinilla para prevenir la expansión de plagas, obteniendo con esta medida una densidad adecuada de los pinares que favorezca su regeneración natural.
La protección del encinar es otra de la medidas empleadas potenciando el crecimiento de encinas en las áreas donde ya estén presentes, junto con una aceleración del desarrollo del encinar como una formación más resiliente frente al cambio climático.
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