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La Junta está interviniendo en la adecuación de infraestructuras de la A-308 para proteger al lince

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GRANADA, 28 (EUROPA PRESS) El delegado territorial de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta en Granada, Manuel Francisco García, ha visitado los trabajos que está llevando a cabo la Consejería en la adecuación de cerca de 25 kilómetros de la carretera A-308, desde su inicio en la autovía A-44 y hasta su conexión con la A-301, con el fin de proteger la población de lince ibérico de la zona.

Las obras, que cuentan con una inversión de 1.339.399 euros, cofinanciadas con el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), tienen así el objetivo de “mejorar la conectividad ecológica” en las infraestructuras viarias de la Sierra de Arana, en Granada, según ha explicado este sábado la Junta en una nota.

Manuel Francisco García ha señalado que “se trata de una intervención necesaria y fundamental para proteger la población de lince ibérico de la zona, ya que estamos hablando de un tramo de vía de especial peligro para los ejemplares, el de mayor número de atropellos de individuos de la especie registrado”.

Así las cosas, el delegado ha explicado que “se está ejecutando la impermeabilización de la vía, con vallados específicos, a la vez que se aprovecha la estructura transversal existente para permitir un flujo seguro de ejemplares de la especie y otros animales a ambos lados de la carretera”.

Además, ha añadido que “este proyecto es un paso crucial para garantizar la supervivencia de esta especie y mejorar la conexión del entorno de Sierra Arana”.

DETALLE DE LAS ACTUACIONES

El proyecto contempla la colocación de cerramientos y cancelas con estructuras diseñadas para evitar que los linces y otras especies de fauna silvestre accedan a la carretera, reduciendo así el riesgo de atropellos, según defienden desde la Junta.

Del mismo modo, se están ubicando dispositivos de vallado virtual en hitos y biondas de la carretera, que emiten señales que disuaden a los animales de acercarse a la misma, lo que “aumenta la seguridad, no sólo de los animales, sino también de los conductores”.

Por otro lado, se están instalando rampas de escape que van a permitir a los ejemplares que accedan accidentalmente a la carretera que puedan salir de ella sin correr el riesgo de ser atropellados. Asimismo, se va a adecuar el paso superior existente sobre la A-308, para facilitar el cruce seguro de la fauna silvestre, promoviendo la conectividad entre diferentes áreas del hábitat.

Para el delegado territorial en Granada, el proyecto “es un ejemplo de la sensibilidad de la Junta de Andalucía con el medio natural, la fauna y la protección del patrimonio”, y en esa línea ha destacado que, “además de los beneficios ambientales, el proyecto de mejora de la conectividad ecológica en Sierra Arana también tendrá un impacto positivo en la comunidad local”.

Al respecto, ha incidido en que “se están creando empleos directos e indirectos durante la ejecución de las obras, y la mejora de la infraestructura viaria va a contribuir, sin lugar a dudas, al desarrollo económico de la comarca”.

IMPORTANCIA DEL PROYECTO

La fragmentación del hábitat es “uno de los principales desafíos para la conservación del lince ibérico”, según advierte de la Junta, que al respecto señala que las infraestructuras viarias pueden actuar “como barreras que dificultan el movimiento de los animales y limitan su acceso a recursos necesarios”.

La mejora de la conectividad ecológica es así “esencial para garantizar la supervivencia a largo plazo de esta especie y otras que habitan en la región”.

Desde la Junta han precisado que el proyecto de Sierra Arana, que se desarrolla en los municipios de Iznalloz, Piñar y Morelabor, no sólo beneficia al lince ibérico, sino también a otras especies de fauna silvestre y a la biodiversidad en general.

Así, desde la administración andaluza resaltan que la creación de corredores ecológicos y la implementación de medidas de protección “contribuyen a la conservación de los ecosistemas locales y a la promoción de un entorno más saludable y equilibrado”.

En este sentido, Manuel Francisco García ha remarcado que “el lince ibérico, si bien ya no es una especie en peligro de extinción, sí sigue amenazada, por lo que su protección requiere esfuerzos continuos y coordinados”.

“Esta intervención es una de las muchas actuaciones que el Gobierno andaluz está llevando a cabo para garantizar la supervivencia de la población de linces, así como la sostenibilidad del ecosistema de la zona”, ha concluido el delegado.


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