SAN FERNANDO (CÁDIZ), 12 (EUROPA PRESS)
La alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada (PSOE), y el alcalde Cádiz, Bruno García (PP), han anunciado este martes que ambos ayuntamientos trabajan para dar respuesta al contexto de sequía con la contratación de manera provisional de una planta portátil que permitirá tener 300 metros cúbicos al día de agua depurada para baldeo y limpieza de calles, así como para el riego de parques y zonas verdes y ajardinadas durante este verano.
Esto será una solución “provisional” en la que se trabaja en paralelo al proyecto definitivo para hacer de la Estación Depuradora de Aguas Residuales Cádiz-San Fernando (Edacafesa) una entidad con una gestión “eficiente del agua”, dotada con una estructura administrativa y política propias, tal y como se acordó en el encuentro institucional mantenido entre Patricia Cavada, alcaldesa de San Fernando, y Bruno García, alcalde de Cádiz.
Ambos ayuntamientos han señalado en una nota conjunta que de esta manera San Fernando y Cádiz darán un nuevo paso para hacer frente común al contexto de emergencia marcado por la sequía y responder con eficiencia y responsabilidad medioambiental a las necesidades hídricas de ambos municipios.
Durante los últimos meses los equipos de ambos ayuntamientos han estado trabajando “contrarreloj” en el proyecto de Edacafesa, un compromiso firmado entre ambos alcaldes que se materializará “en las próximas semanas” ya que la sociedad supramunicipal contará inicialmente con una gerencia y un puesto administrativo. Así ha sido anunciado este martes en rueda de prensa tras la visita de Bruno García al Ayuntamiento isleño.
“No hemos parado de trabajar para conseguir que esa empresa que nos une se active”, ha explicado Patricia Cavada, quien ha señalado que el objetivo era hacer de Edacafesa “una herramienta útil con autonomía propia y la agilidad necesaria para hacer contrataciones y desarrollar proyectos”.
En ese sentido, ha manifestado que “el futuro es claro” y pasa por incorporar un tratamiento terciario que permita la reutilización de toda el agua para riego y baldeo que ambas ciudades depuran y que “actualmente se tira al mar”. “No podemos malgastar ni una gota de agua”, ha incidido Cavada, quien ha trasladado que ambos ayuntamientos “son conscientes de la necesidad de responder de manera inmediata a los retos señalados por el grave contexto de sequía que asola al país y que tiene una especial incidencia tanto en la provincia de Cádiz como en Andalucía”.
“Hoy damos un paso fundamental entre las dos ciudades para tratar de paliar los efectos de la sequía. Tenemos un problema de extraordinaria gravedad y debemos afrontarlo las dos ciudades de manera conjunta”, ha explicado por su parte el alcalde de Cádiz, Bruno García.
UNA SOLUCIÓN “INMEDIATA Y PROVISIONAL”
La actual situación de sequía obliga a ambos ayuntamientos a reaccionar “con urgencia” y reutilizar toda el agua disponible “bajo un criterio de responsabilidad medioambiental”, como se ha defendido.
De este modo, el hito inmediato pasa por alquilar y poner en funcionamiento para este verano una planta o estación portátil que permita tratar el agua depurada mientras se sigue trabajando en paralelo en la solución definitiva. Esta planta de alquiler permitirá recoger el agua en camiones cisterna y tendrá un coste anual para Edacafesa de unos 280.000 euros.
En esta línea, Bruno García ha matizado que la solución provisional anunciada, cuya instalación requerirá de una mínima obra civil, da respuesta a un horizonte “a corto plazo” y que lo que se hace en este día les permite “afrontar el futuro con más garantías”. Así, ha asegurado que ambas ciudades gaditanas se toman “muy serio la falta de agua”.
Esta alternativa trataría para baldeo y limpieza de calles, así como para el riego de parques, zonas verdes y ajardinadas, 300 metros cúbicos al día a emplear en ambas ciudades de la Bahía de Cádiz. Los planes de emergencia articulados por ambos ayuntamientos ante la emergencia planteada por la actual sequía prohíben expresamente, entre otras medidas de ahorro municipal y ciudadano, el uso de agua potable para estas tareas.
Así, el proyecto constructivo definitivo del tratamiento terciario de la EDAR Bahía de Cádiz permitirá realizar la segunda fase del tratamiento del agua de ambas ciudades, que suman más de 230.000 habitantes, para su uso en las tareas de riego y baldeo según la normativa.
La ejecución de este proyecto, ya elaborado, asciende a 2,7 millones de euros, inversión solicitada por ambos consistorios a la Junta de Andalucía en el marco de las medidas autonómicas vinculadas a infraestructuras y dotaciones hidráulicas a acometer con carácter inmediato en las zonas de la comunidad donde la falta de agua sea ya extrema y cuyo periodo de ejecución se establezca como corto.
El proyecto está a falta de una fase final de tratamiento e incluye dos conducciones de abastecimiento para ambos municipios gracias para aprovechar al 100% lo que ahora se desperdicia por motivos técnicos. Además, sería necesaria una tubería de impulsión del afluente de las aguas regeneradas de la EDAR Cádiz-San Fernando, cuyo coste se ha cifrado en 1,9 millones.
El tercero de los proyectos conjuntos sería la instalación de dos motores de cogeneración de 300 KWe cada uno y de planta solar fotovoltaica de 770 KWn en la estación depuradora conjunta de aguas residuales de Cádiz y San Fernando. La infraestructura dotaría de autoeficiencia energética a la planta, apostando por su sostenibilidad, abaratando costes y permitiendo que la EDAR, ubicada en un parque natural, redujera su huella de carbono. El coste de ejecución de este último alcanza los 2,6 millones de euros.
Por último, ambos regidores han coincidido en la necesidad de hacer una llamada “a la responsabilidad y la acción general de la ciudadanía”, entendiendo que si se sigue haciendo un mismo uso del agua en hogares, comercios y empresas, “ninguna inversión garantizará que salgamos de esta situación”.
Es por eso que se necesita de la implicación “directa y decisiva de los vecinos y las vecinas de ambas ciudades” para que hagan “pequeños gestos cotidianos” con los que ahorrar el 20% de agua propuesto por ambos ayuntamientos a través de sus ordenanzas municipales y las campañas de concienciación y sensibilización social lanzadas.
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