ALMERÍA, 5 (EUROPA PRESS)
Los técnicos de Adif junto con miembros de SOS Vencejos han constatado la presencia de ejemplares protegidos de vencejo pálido –‘Apus pallidus’– en cuatro marquesinas de la Estación Intermodal, cuyo derribo se pospondrá hasta que finalice la época de reproducción y anidamiento de esta especie para garantizar su preservación, toda vez que posteriormente se introducirán medidas compensatorias para asegurar su anidación la próxima primavera.
Según han informado desde la asociación a Europa Press, durante primera hora de este jueves los miembros de la entidad y el personal técnico dispuesto por Adif, que previamente había mantenido contactos con la Delegación Territorial de Sostenibilidad de la Junta de Andalucía, inspeccionaron con una cámara endoscópica de cinco metros los espacios y oquedades en los que, según los indicios, no había nidos de vencejo a fin de certificar su ausencia.
En este sentido, entre los trabajos más adecuados, se ha apostado por desarmar manualmente o mediante técnicas selectivas las marquesinas en las que no se ha detectado la presencia de vencejos para prevenir la posible existencia de aves no identificadas durante las labores de demolición de la estación, que previsiblemente comenzará este mes como parte de las obras del soterramiento.
El vencejo es una especie silvestre en régimen de protección especial que anida en esta época del año, de modo que su presencia en las marquesinas de la Intermodal obliga a preservar los nidos así como a establecer, tras su posterior retirada, medidas compensatorias para asegurar la preservación de la especie.
En este sentido, desde la entidad conservacionista se ha hecho llegar a Adif un informe con medidas para garantizar, de cara a la próxima primavera, que estas aves filopátricas cuenten con un espacio adecuado para anidar nuevamente, ya que el avance de las obras hará que en abril de 2025 haya desparecido la intermodal sin que aún esté edificada la nueva terminal de AVE.
El plan de acción permitirá avanzar en las obras del soterramiento sin que ello signifique un retraso en las actuaciones al poderse iniciar los trabajos de desmantelamiento, previstos a partir de este mes de julio, en las zonas no afectadas, conforme a la actuación aconsejada también por los agentes de Medio Ambiente.
TORRES DE BIODIVERSIDAD
Desde SOS Vencejos se ha trasladado su apuesta por instalar en las inmediaciones de las obras las denominadas torres de biodiversidad, una nueva alternativa que “de forma muy llamativa y sencilla” alberga una cantidad elevada de nidos, “hecho que además favorece el éxito del dispositivo”, según han expuesto.
La asociación ha detallado que este dispositivo fue instalado el pasado otoño en el municipio de Coria del Río (Sevilla) con un notable éxito puesto que antes de comenzar el invierno había murciélagos que ya habían empezado a ocupar los dormideros que integra, toda vez que “hace unas semanas los vencejos, ya de vuelta de sus cuarteles de invierno, han comenzado a ocupar” estas torres.
“Creemos que ésta es una opción muy válida para ofrecer como alternativa a los vencejos debido a los dos años que se prevén de construcción de la nueva estación”, han valorado ante un diseño que es capaz de acoger hasta 150 nidos, puesto que facilita la adopción de las aves como vencejos, estorninos o gorriones toda vez que ofrece una zona inferior para murciélagos.
Las torres de biodiversidad cuentan con una altura de 12 metros, seis por encima del nivel del suelo, así como con una envolvente que reduce el calor por radiación solar, toda vez que posee un sistema para el aterrizaje de las especies e, incluso, un sistema de altavoces que se nutre de energía fotovoltaica para favorecer la atracción de los ejemplares mediante audios de reclamo.
Más allá de estas soluciones transitorias, desde SOS Vencejos se apunta la posibilidad de introducir en las obras de la nueva estación de AVE la construcción integrativa de nidos, con cavidades dentro de la propia estructura, o en su defecto, la colocación de cajas nido aptas para los vencejos bajo los aleros.
“La mejor opción, siempre que las características de la construcción lo permitan, es que se proporcionen oquedades dentro de la propia estructura de los edificios, aprovechando cámaras de aire, juntas de dilatación o espacio bajo las tejas, así como colocar piezas de construcción ya prediseñadas que proporcionan un acceso al interior”, han valorado los expertos.
Los vencejos son aves estrictamente insectívoras que se alimentan de alrededor de 800 insectos o arácnidos diarios, si bien en momentos de cría, una pareja reproductora puede obtener “50 gramos de alimento por día, lo que corresponde a más de 20.000 insectos o arácnidos”, lo que las convierte en “controladores naturales de plagas”.
La pérdida de estas aves, incluidas en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, puede ocasionar “graves repercusiones en la salud pública”, estiman desde SOS Vencejos, desde donde apunta “el riesgo de contagios de la ‘fiebre del Nilo’ en provincias como Cádiz o Sevilla”.
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