ALMERÍA, 9 (EUROPA PRESS)
El Programa de Seguimiento de Fauna Silvestre de Andalucía ha concluido que el “colapso hídrico” del humedal protegido de Las Salinas de Cabo de Gata (Almería) en mayo debido a la obstrucción del canal que lo alimenta de agua salina “debió llevar a un fracaso reproductor” para la “mayoría” de las “109 parejas de hasta ocho especies” de aves acuáticas que en ese momento nidificaban en sus charcas.
Los datos de seguimiento mensual que se hace en el paraje enclavado en el parque natural desde 1993 e incluidos en la Red de Información Ambiental de Andalucía, revelan que cuando aconteció la “falta” de aporte de agua marina”, las aves se encontraban “en plena reproducción” y también se pudo constatar la presencia de “nidadas de huevos junto a pollos de diferentes edades según las diferentes especies”.
De acuerdo a los resultados de este programa adscrito la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul facilitados a Europa Press, es “por este motivo” que, si bien en mayo “llegaron a estimarse hasta 109 parejas” de un total de “ocho especies”, el “fracaso reproductor debió acontecer para la mayoría de ellas”.
El informe de la administración autonómica apunta como causas detrás de este “fracaso reproductor” que la falta de agua “pudo haber provocado una pérdida de disponibilidad de alimento para los pollos” y también “un incremento de la accesibilidad a las distintas zonas y colonias de cría” del humedal para “predadores como el jabalí y el zorro”.
En 2021, con 151 parejas de un total de seis especies, “sí hubo éxito reproductor ya que no debió verse afectado por tales impactos favorecidos por la bajada de niveles y la pérdida de lámina de agua”, según añade.
El programa de seguimiento mensual de las aves acuáticas presentes en Las Salinas de Cabo de Gata revela, asimismo, que la “ecología propia” de algunas especies censadas como el Chorlitejo patinegro y la Gaviota patiamarilla pudo hacer que “no les afectase el fracaso reproductor tanto como al resto”.
Precisa que la riqueza de especies que han nidificado en las Salinas de Cabo de Gata ha sido “oscilante” entre “las cinco y las 13”, y señala que casi en su totalidad se engloban en el grupo de las larolimícolas.
En esta línea, concreta que, entre ellas, las que han dominado más regularmente han sido la avoceta común, con entre 50 y 600 parejas según los años, el chorlitejo patinegro, con entre diez y 120, el charrancito común con entre una y 150, y la cigüeñuela común con entre una y 80.
“EMPOBRECIMIENTO EN BIODIVERSIDAD”
De acuerdo al seguimiento intermensual, el humedal de Salinas de Cabo de Gata, explotado industrialmente por Unión Salinera SL, perteneciente al Grupo Salins, albergó entre enero y julio de 2021 un total de aves acuáticas de entre 1.400 y 3.200 efectivos, donde predominaron, en orden decreciente, el flamenco rosado con entre los 350 y los 1.400 ejemplares, las gaviotas y afines con entre las 400 y las 850; las limícolas y afines con entre las 200 y las 950.
Revela que en el mismo periodo de este mismo año 2022, si bien los grupos dominantes fueron los mismos, “su abundancia fue inferior”, y traslada que hasta la mayo la “abundancia general osciló entre los 1.100 y los 1.900 especímenes”, incluyendo “entre 500 y 800 flamencos, entre 350 y 1.100 gaviotas y afines y entre 50 y 500 limícolas y afines”.
“No obstante, tales poblaciones acabaron por desplomarse en los dos últimos meses de seguimiento debido a la falta de agua en el sistema, pues en junio y julio ya solo quedaban respectivamente 358 y 298 ejemplares”, según destaca.
El informe detalla que la mayor parte de las especies que “realizaron la fuga de contingentes” fueron aquellas que suelen alimentarse fundamentalmente en las aguas del humedal, como flamencos y gran parte de las larolimícolas, aunque “siguieron en el humedal” ciertas gaviotas que, como la gaviota de Audouin “no son dependientes de la presencia de agua en el sistema, por utilizarlo esencialmente como descansadero”.
“Tales resultados arriba mencionados hicieron que, mientras la riqueza específica presente en las Salinas durante ambos años hasta mayo de 2022 osciló entre las 18 y las 28 especies en total, a partir entonces comenzó a apreciarse un empobrecimiento en diversidad que llevó al complejo a ostentar en junio tan solo 12, mientras que en julio, únicamente cuatro”, concluye.
La información facilitada por la administración refleja, por último, que fue en mayo “cuando ya comenzó a percibirse una bajada de los niveles de agua por falta de suministro”, con “tan solo ocho centímetros” y remarca que la situación “llego a ser extrema en junio y julio, con charcones totalmente secos, profundidades que rondaron los cero centímetros en los evaporadores y extensiones encharcadas inferiores al 50 y al 20 por ciento, respectivamente, durante ambos meses”.
OBRAS EN EJECUCIÓN EN EL HUMEDAL
La Junta anunció el 20 de julio que Unión Salinera SL se había “comprometido” a iniciar el 1 de agosto la obra que, finalmente, se está abordando con la reparación de la galería obstruida después de que se descartase la elaboración de un sondeo propuesta por los técnicos de la administración autonómica para la posterior impulsión por bombeo del agua hasta las charcas.
Según informó en su momento, la “complejidad” de los trabajos a ejecutar obligó “localizar y contratar” los servicios de una empresa “capacitada” para resolver el problema originado por la acumulación de material a lo largo de 400 metros de galería y a consecuencias de las intensas lluvias que se registraron en la zona en primavera.
El “problema técnico” se comunicó oficialmente, según la Junta, el 7 de junio y está previsto que la actuación pueda estar finalizada a lo largo del presente mes de octubre.
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