MELILLA, 25 (EUROPA PRESS)
La Policía Nacional ha detenido en Melilla a 40 marroquíes que se hacían pasar por menores no acompañados (MENAS) para posteriormente solicitar asilo con sus pasaportes originales como mayores de edad.
Según ha informado este miércoles un portavoz de la Jefatura Superior de Policía, la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (Ucrif) de la Jefatura Superior de Policía de Melilla ha procedido al descubrimiento e identificación de 64 súbditos marroquíes mayores de edad que se hacían pasar por MENAS al objeto de aprovechar las ventajas que ofrece la obtención de la tutela por la Ciudad Autónoma de Melilla en base a la supuesta minoría de edad.
Fruto de la operación policial, 40 de ellos han resultado detenidos tanto en Melilla como en otras provincias españolas –Bilbao, Gerona, Zaragoza, Valencia, Almería, Málaga y Algeciras–. Sobre los 24 restantes pesan órdenes de búsqueda y detención y a todos se les investiga por varios presuntos delitos de falsedad documental.
El portavoz policial ha detallado que el inicio de la investigación data de principios del año 2022 cuando efectivos de la Ucrif alertados por la Policía Local y también por trabajadores del propio Centro de Menores La Purísima, detectan la presencia de varios nacionales marroquíes mayores de edad que se hallaban inscritos como MENAS en dicho centro, dando lugar a los correspondientes expedientes de protección, los cuales contenían datos falsos acerca de las identidades y edades de los infractores.
Una vez formalizaban el ingreso en el Centro de Menores, los investigados acudían a la Oficina de Asilo sita en el Puesto Fronterizo de Beni Enzar y solicitaban Protección Internacional como asilados, aportando en ese acto sus documentaciones personales donde constaban tanto sus identidades como sus fechas de nacimiento reales, que revelaban que en realidad eran mayores de edad.
Según la citada fuente, de esta forma, y haciendo un uso fraudulento de la figura de la Protección Internacional, los ahora detenidos “pretendían poder salir de Melilla rumbo a la península, siendo perfectamente conocedores de que sus solicitudes serán admitidas a trámite transcurrido un mes desde la misma debido a la sobrecarga del sistema”.
En este sentido, han subrayado que durante ese tiempo, se beneficiaban de manera indebida y con el consiguiente gasto público del acogimiento y demás recursos que el Gobierno de la Ciudad Autónoma reserva para los verdaderos MENAS, entre ellos su alojamiento y mantenimiento en el Centro de Menores.
El portavoz policial ha indicado que el engaño comenzaba cuando alguno de los migrantes era trasladado a Centro de Acogida La Purísima por efectivos de Policía Local tras ser interceptados en la vía pública, generalmente en horario de madrugada, manifestando ser menor de edad. Al ser recepcionados mediante documento de alta por personal del centro, todos los jóvenes sin excepción manifestaban tener 17 años sin aportar documento acreditativo alguno, con lo que desde ese instante se les dispensaba tratamiento de MENA, “generando de forma fraudulenta el correspondiente expediente de protección de menor por parte de la correspondiente Consejería de la CAM”.
Posteriormente, según ha añadido, los jóvenes no permitían que se les realizasen las pertinentes pruebas médicas de determinación de la edad, por lo que su mayoría de edad no podía ser conocida hasta que se personaban en las oficinas de Asilo, en esta ocasión provistos de su pasaporte original, comprobándose de forma fehaciente que eran mayores de edad. Una vez admitida dicha solicitud y realizados todos los trámites inherentes a la misma, los jóvenes en el plazo de un mes abandonaban Melilla rumbo a la península en calidad de solicitantes de asilo, “perfeccionando de esta forma el engaño”.
Merced a las gestiones llevadas a cabo por la Ucrif con la dirección del Centro de Menores La Purísima, con la Consejería de Políticas Sociales y con personal de la Oficina de Asilo y Refugio (OAR), la Policía Nacional hasta la fecha ha podido constatar un total de 64 casos.
Al respecto, ha admitido que debido a la complejidad de la investigación en cuanto al cotejo documental requerido y al estudio fisonómico de los encartados, la actividad de los investigadores se ha extendido durante más de un año.
La investigación en curso es conocida e impulsada por la Fiscalía de Área de Melilla, recayendo la causa judicial en el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 3 de esta ciudad.
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