SEVILLA, 12 (EUROPA PRESS)
El secretario general de Investigación, Desarrollo e Innovación de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Isaac Túnez Figaña, ha defendido este martes que el proyecto de Ley para la creación del Instituto de Salud de Andalucía supondrá la “integración” de las plantillas de la Fundación Progreso y Salud y de la Escuela Andaluza de Salud Pública con “todos los derechos y obligaciones laborales y sociales inherentes” de acuerdo con el Estatuto de los Trabajadores y permitirá una “mayor eficacia de la gestión y reducción de costes operativos”.
Asimismo, la “integración” de las estructuras de la Fundación Progreso y Salud y la Escuela Andaluza de Salud Pública generarán, a juicio del secretario general de la Consejería de Salud, una “mayor competitividad a la hora de la captación de recursos en convocatorias públicas”. Ha insistido igualmente en que la “obligación” de la Administración es “contribuir a la racionalización” del sector instrumental “haciéndolo más coherente y sin duplicidades”. “Las estructuras de la Administración no pueden permanecer ajenas a los importantes desafíos a los que nos enfrentamos en materia de salud pública ni al lugar preeminente de la ciencia y la innovación como palanca esencial” para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Así lo ha expuesto Túnez Figaña en la Comisión de Salud que aborda este martes la creación del futuro Instituto de Salud de Andalucía mediante una Ley. “Ya era hora, señorías, de dar solución al incumplimiento sistemático de la ley 16/2011 de 23 de diciembre” en la que se recogía la creación de un centro de investigación de salud pública en Andalucía, ha recordado el alto cargo de la Consejería de Salud. Para el secretario general, el nuevo instituto, desde su “máxima independencia técnica”, permitirá “fortalecer” la investigación en el ámbito sanitario y logrará “estabilizar” al personal investigador biomédico, consolidándose éste como personal funcionario.
Túnez Figaña ha remarcado que la Ley de creación es fruto de una “escrupulosa tramitación administrativa” con la que se “simplifica” el régimen jurídico al que se encuentran actualmente “sometidos” los distintos órganos de la Junta de Andalucía que llevan a cabo investigación, desarrollo, innovación, formación y consultoría en salud pública. Porque, tal y como ha subrayado, con la nueva estructura del instituto, se cumplirán los “principios de estabilidad presupuestaria, eficiencia y economía”, así como se impulsarán las “sinergias operativas” con las que lograr “una mayor eficacia de la gestión y una reducción de costes operativos”.
“El Instituto de Salud de Andalucía promoverá la creación de equipos multidisciplinares que trabajen con una visión holística y cooperará con la sociedad civil y las demás administraciones públicas, fortaleciendo la investigación operativa y promoviendo la mejora de la colaboración intersectorial, imprescindible para el funcionamiento del sistema de investigación, desarrollo, innovación, formación y consultoría”, ha concluido el responsable de la investigación e innovación en la Consejería de Salud y Consumo.
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