SEVILLA, 26 (EUROPA PRESS)
La portavoz del Grupo Parlamentario Por Andalucía y miembro de Izquierda Unida, Inma Nieto, ha reprochado este jueves las reticencias del Partido Popular a la implantación de la jornada laboral semanal de 37,5 horas por considerar que vuelve a reproducir “los mismos malos augurios que oíamos cuando se decidió subir el Salario Mínimo Interprofesional”, por lo que ha considerado que su propuesta para encajar la actual jornada en cuatro días laborales entraña que “siempre hay una coma, siempre hay un pero”.
En declaraciones a los medios de comunicación durante su asistencia a la concentración convocada por los sindicatos CCOO-A y UGT-A en apoyo de la reducción de la jornada laboral, Nieto ha argumentado que “estamos hablando de un avance muy necesario y muy deseado” por la clase trabajadora al esgrimir que “desde hace 40 años no tienen una reducción de jornada que permita una mejor conciliación, un disfrute de la vida”.
Tras esgrimir el precedente del aumento del salario mínimo por cuanto “lejos de cumplirse esos vaticinios catastrofistas ha sido un revulsivo económico”, que ha supuesto “una mejora objetiva para muchos trabajadores”, ha considerado que se trata de “dar este paso más”.
Ha sostenido que en el caso del Partido Popular arrastra el hándicap de “haber votado en contra de la reforma laboral después de que la propia patronal la diera por buena”, hecho al que ha sumado “su crítica a la subida del salario mínimo interprofesional o de la revalorización de las pensiones”.
“Al Partido Popular nunca se le puede esperar en el apoyo y en el impulso de medidas que benefician a los trabajadores y trabajadoras”, ha sostenido, antes de expresar su deeseo de que “la reducción de la jornada salga con un respaldo abrumador del Congreso de los Diputados porque tiene un respaldo abrumador en la calle” y que “pronto haya una ley en el Congreso de los Diputados que permita un nuevo avance para los trabajadores”.
La portavoz parlamentaria de Por Andalucía ha señalado como escenario de fondo “la resistencia de la patronal”, de la que ha apuntado que “reproduce el mismo clima y la misma polémica” cuando en 1983 “se hizo la modificación a las 40 horas de jornada semanal”.
Nieto ha blandido un reciente informe de Comisiones Obreras sobre “las miles y miles de horas extraordinarias que no son retribuidas”, argumento que ha sumado “la evolución de los beneficios empresariales”, para inferir de estos parámetros que “en este país hay capacidad productiva y de generación de riqueza suficiente como para una reducción de la jornada”, mientras ha apuntado que para las pequeñas y medianas empresas hay “una propuesta de ayuda a toda la contratación” como consecuencia del impacto de la reducción de jornada.
“No va a tener ningún problema con la productividad”, ha augurado sobre posibles consecuencias empresariales.
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