SEVILLA, 31 (EUROPA PRESS)
El Consejo Andaluz de Colegios de Administradores de Fincas ha emitido una serie de recomendaciones para dejar cerrado de forma correcta el inmueble usado durante el periodo estival, en alusión a las segundas viviendas que se ubican mayoritariamente en la costa de las provincias como Málaga y Granada, seguidas de Almería, Cádiz y Huelva.
“Es esencial que este proceso se realice de forma planificada para dejar la vivienda preparada y que se mantenga en las mejores condiciones posibles para su regreso”, expone la entidad detallando que una de las principales recomendaciones es reforzar la seguridad de la vivienda, ya que la gran mayoría de ellas permanecen desocupada durante el resto de los meses del año, por lo que es recomendable que la vivienda cuente con alarmas silenciosas, sistemas de vídeo vigilancia remota o cuente con los servicios de una empresa de seguridad.
Es igualmente recomendable que la vivienda cuente con un sistema antincendios o de alerta temprana como detectores de humo que puedan reducir el tiempo de reacción en caso de incendios; así como planificar de forma anticipada qué elementos vamos a llevarnos de vuelta y cuáles permanecerán en la vivienda; la limpieza de la vivienda eliminando todo resto orgánico que pueda provocar la proliferación de insectos y cubrir con algún tipo de elemento tanto el mobiliario del interior como del exterior, en caso de que no se puedan dejar dentro del inmueble, lo que ayuda a su preservación y uso posterior.
Todas las puertas y ventanas del domicilio deben revisarse antes de abandonar el inmueble para garantizar que se han dejado correctamente cerradas con objeto de evitar robos o posibles ocupaciones ilegales de la vivienda y dejar persianas y cortinas algo abiertas para evitar dar pistas de que la vivienda está desocupada.
De la misma forma, y con el mismo objetivo, es recomendable que algún familiar o vecino de confianza que resida todo el año en esa zona, pueda encargarse de retirar de la correspondencia de los buzones.
También se aconseja revisar las instalaciones de agua y cerrar completamente la llave general de paso del agua para prevenir posibles inundaciones que afectarían tanto a la vivienda como a las colindantes; así como tapar los desagües para evitar insectos y cerrar los grifos por precaución.
Igualmente es necesario cortar el interruptor general de la luz, paso en el que tener en cuenta que si tenemos cámaras de videovigilancia, éstas dejarían de estar operativas. Además se recomienda revisar los enchufes de los electrodomésticos y en el caso del frigorífico o el congelador, dejarlos vacíos, limpios y con las puertas para prevenir la aparición de malos olores.
La entidad recomienda además “contar con un administrador/a de fincas colegiado/a, que cuentan con un amplio equipo de profesionales que trabajan los 365 días del año para que la capacidad de reacción y solución ante los imprevistos, se minimice considerablemente propiciando así la tranquilidad del propietario y de toda la comunidad de vecinos”.
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