CÓRDOBA, 31 (EUROPA PRESS)
La Casa María Auxiliadora, iniciativa social que promovió la Comunidad de la Compañía de Jesús en Córdoba en enero de 2013 y que cuenta con el apoyo incondicional de Cáritas Diocesana de Córdoba y la Fundación Don Bosco, desde sus inicios, ha dado acompañamiento a medio centenar de jóvenes en riesgo de exclusión social en sus diez de historia.
Esta iniciativa, según ha informado Cáritas Córdoba en una nota, está dirigida a “jóvenes en exclusión social de entre 18 y 24 años que han estado amparados por el sistema de protección de menores y que, una vez cumplida la mayoría de edad, son sacados del sistema y pasan a vivir en grave riesgo de abandono y exclusión social”.
Fue el superior de la Comunidad Jesuita en Córdoba, el padre José María Margenat, quien, en su momento, propuso a Cáritas Diocesana de Córdoba la cesión de un piso en la calle El Greco, para acoger a jóvenes en exclusión social, y quien, a su vez, propuso a la Fundación Don Bosco un trabajo conjunto de acompañamiento a jóvenes.
Una vez firmado un convenio de colaboración al respecto, en enero de 2013, entre las tres entidades eclesiales, se dispuso la vivienda y los primeros cinco jóvenes acogidos comenzaron su andadura de autonomía el 30 de abril de 2013.
El objetivo de esta iniciativa es “acompañar a jóvenes en una etapa clave de su proyecto de vida, ayudándoles en su autonomía personal y social, facilitándoles un proceso formativo que, unido a la inserción laboral en Solemccor y otras empresas, les permite una inclusión social en todos los ámbitos”. Así, en estos diez años han pasado por la Casa María Auxiliadora jóvenes de España, Marruecos, Argelia, Guinea, Burkina Faso, Mali, Gambia, Senegal y Nigeria.
La clave primordial es “el acompañamiento personalizado, creando vínculos de amistad en un clima de auténtica familia, haciéndoles descubrir que el cariño y la ayuda mutua son valores capaces de cambiar la soledad y la exclusión en una auténtica experiencia de fraternidad”.
En cuanto a los datos más significativos de estos diez años, destaca que el número total de jóvenes acogidos asciende a 50 y que todos ellos han iniciado un itinerario personalizado de inserción socio laboral, de los cuales 42 han sido insertados laboralmente y 13 han desarrollado su proceso de inserción sociolaboral y acompañamiento en Solemccor, la empresa de inserción social de Cáritas.
La formación también ha sido vital en este acompañamiento, “de cara a mejorar su futuro, y los datos no pueden ser mejores, 46 jóvenes han mejorado su nivel formativo y 24 se han sacado la titulación en ESO” y, en todo este contexto, hay que resaltar “la labor de las personas voluntarias que han estado vinculadas a este proyecto durante esta década”, y de “los 12 técnicos que han formado parte del equipo educativo en este periodo y han conseguido que 43 jóvenes puedan regularizar su situación documental”.
- Te recomendamos -
