SEVILLA, 14 (EUROPA PRESS)
La Asociación Andaluza de Enfermería Familiar y Comunitaria (Asanec) ha pedido este martes la implementación de un mayor número de plazas de esta especialidad en el Servicio Andaluz de Salud (SAS) para evitar el éxodo de enfermeras al extranjero. Un fenómeno que, en palabras de la asociación, genera una “pérdida de talento enfermero” y limita el acceso de la población a “una atención primaria de calidad que favorezca la promoción de estilos de vida saludable y reduzca la morbimortalidad”.
Desde Asanec han explicado que, a pesar de los avances más recientes en Andalucía, entre los que se incluye la creación de 411 plazas estructurales, “todavía no se ha desarrollado de manera adecuada la especialidad a nivel asistencial, y son pocas las enfermeras especialistas en activo”. En este sentido, han señalado que “Andalucía es una de las comunidades que más tardíamente ha implementado esta especialidad y solo de manera incipiente, con pocas plazas para su extensión”.
Por ello, la asociación apunta a la falta de desarrollo y el volumen “insuficiente” de plazas como el principal motivo por el que las enfermeras de familia de la comunidad andaluza deciden migrar a regiones “donde hay una gran demanda de enfermeras y unas mejores condiciones laborales”. Estos destinos incluyen países como Reino Unido, Alemania, Países Bajos, Noruega o Suiza y comunidades autónomas como el País Vasco o la Comunidad Valenciana.
Asimismo, han destacado que este éxodo profesional limita “el acceso de la población andaluza a una atención primaria de calidad con enfoque familiar y comunitario, centrada en la desmedicalización y en una cultura de promoción de la salud y prevención de la enfermedad”.
Asanec, como sociedad científica, ha señalado que “la ciudadanía precisa de especialistas con una formación específica en Salud Familiar y Comunitaria”. Además, ha puesto en valor la labor de estas profesionales en materia de “sensibilización y educación de una población sana”, ya que esta es la disciplina que se ocupa de la prevención de enfermedades, atención a pacientes crónicos, educación sanitaria y coordinación de la atención sanitaria a distintos niveles.
Frente a esta situación, la asociación ha reclamado el desarrollo de la especialidad en el SAS y la “adecuación en las estructuras y plantillas de atención primaria de estas especialistas”. Además, ha insistido en que “es necesario” que el desarrollo de la implementación “no se alargue en el tiempo” y que “las ratios se adecuen a la de países de nuestro entorno”.
Según datos del Ministerio de Sanidad, en España, la ratio de enfermeras por cada mil habitantes es de 6,3 frente al 8,5 de la Unión Europea –5,51 en el caso de Andalucía, que posee una de las cifras más bajas del país–. Para Asanec, estas cifras impiden “la mejora de la accesibilidad al nivel primario de salud y el desarrollo pleno competencial de las enfermeras especialistas de Familia y Comunitaria”.
En este contexto, la asociación ha solicitado un aumento de las plazas de enfermería familiar y comunitaria para garantizar “la calidad del sistema sanitario andaluz” y el “retorno de la inversión en formación de estas enfermeras”. Además, ha pedido implementar “estrategias que potencien la estabilidad laboral con contratos a largo plazo” para lograr “el reconocimiento adecuado de los profesionales como en otros países comunitarios” y evitar la “sobrecarga de trabajo de las enfermeras especialistas existentes en la atención primaria”.
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