El IAF y CCOO han organizado esta mañana una jornada sobre la importancia de compaginar trabajo y vida laboral
El director gerente del Instituto Aragonés de Fomento (IAF) Ramón Tejedor, ha celebrado esta mañana que las organizaciones sindicales, empresariales y el propio Instituto Aragonés de Fomento (IAF) hayan acordado la creación del nuevo sello RSA+, un nuevo estadio con el objetivo de que “las personas estén en el centro del sistema de producción de las empresas”.
La sede de Comisiones Obreras (CCOO) ha acogido esta mañana una jornada sobre la Responsabilidad Social en Aragón, centrada principalmente en la conciliación laboral y familiar de los trabajadores, un ámbito que ha sufrido importantes cambios.
Precisamente, la conciliación es uno de los pilares del nuevo sello RSA+, junto a la igualdad de género, el fomento de las iniciativas culturales y el establecimiento de sinergias con entidades no lucrativas para llevar a cabo proyectos de voluntariado. En el próximo mes de diciembre se conocerá qué entidades y empresas son las primeras en obtener este sello de excelencia empresarial.
Tal y como ha expuesto el gerente de la Unidad de Empresas del IAF, Jesús Arnau, a fecha 14 de septiembre, ya se han adherido 793 organizaciones a las medidas de Responsabilidad Social de Aragón. De ellas, 474 han obtenido el sello RSA. Esto implica, según Arnau, que “casi 500 corporaciones habrán decidido ir más allá de lo que las exigencias legales obligan”.
Además, se han realizado 30 jornadas de difusión, a las que han asistido 3.526 asistentes, y se han realizado 74 cursos de formación con 1.316 profesionales. En total, desde el IAF calculan que han llegado a 87.000 empleos directos.
Asimismo, Arnau ha detallado seis aspectos claves en la gestión empresarial para ser reconocida dentro de la Responsabilidad Social: contar con una sostenibilidad en el tiempo, mantener una vinculación con los clientes, ofrecer confianza y transparencia, contar con una implicación con su entorno, minimizar impactos ambientales e impulsar la retención de talento.
En esta jornada, el secretario general de CCOO, Manuel Pina, ha recibido un sello por el impulso que desde el sindicato han dado a la Responsabilidad Social durante esta legislatura.
Las empresas ante la conciliación en la Responsabilidad Social
El núcleo central de la jornada fue una mesa redonda que ha contado con la colaboración de empresas como DKV y Pikolín para exponer sus medidas que favorezcan esa conciliación laboral.
En DKV decidieron comprometerse en 1998 con la Responsabilidad Social y, entre otras cuestiones, con la conciliación. El responsable de Gestión del Desempeño e Innovación en Recursos Humanos, Francisco Peña, ha manifestado que la conciliación “favorece muchísimo la productividad de los empleados”. Tener empleados que estén tranquilos en el cuidado de sus hijos, mayores y otras actividades familiares o no familiares que necesiten les hace estar más satisfechos y felices a la hora de trabajar”, ha resaltado.
De hecho, el responsable de la Federación de Servicios de CCOO Aragón, Gerardo Montori, ha destacado que las empresas del sector “han venido desarrollando políticas de Responsabilidad Social en las empresas”. No obstante, ha pedido que los comités de empresa tengan una mayor representación en los planes y memorias de estos ámbitos.
Por su parte, desde Pikolín han querido apoyar estas jornadas para animar a las empresas industriales a que hagan todos los esfuerzos posibles por conseguir una certificación. Su director de Desarrollo Personal, Enrique Iniesta, cree que la Responsabilidad Social “pone en valor todo lo que hacemos por la sociedad, el entorno y con clientes y proveedores”.
Actualmente, en Pikolín “estamos trabajando sobre todo en medidas de conciliación con horarios y actividades socioculturales que pueden ayudar a mejorar la convivencia y a conocernos más entre nosotros”.
Finalmente, el responsable de organización de CCOO Industria Aragón, Carlos Guerrero, ha lamentado que todavía “falta mucho por hacer” en las empresas industriales en cuanto a la conciliación laboral. “Si bien es cierto que en las empresas de más de 250 trabajadores es usual establecer planes de igualdad, hay un déficit importante en el seguimiento y cumplimiento de las medidas acordadas. En las empresas de menos de 250 trabajadores y no tienen obligación de hacerlo, son reacias a pactar medidas que faciliten en la medida de lo posible la conciliación en las actividades domésticas”, ha criticado.
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