Durante el coloquio se han tratado las razones y consecuencias de la drogodependencia y la importacia de la educación para prevenir
BILBAO, 21 (EUROPA PRESS)
La universidad de Deusto, en colaboración con FAD Juventud, ha acogido este viernes en Bilbao han abordado este viernes en Bilbao la problemática social del narcotráficio y las adicciones en el contexto de los temas tratados en la película ‘Tierra de nadie’, que se estrena el próximo 28 de marzo en cines, y que lleva a la gran pantalla la realidad social, “la parte oscura y humana” del narcotráfico. Ubicada en Cádiz y basada en un personaje real, se trata de una realidad que “podría aplicar a cualquier parte del mundo”.
En este sentido, ‘Tierra de nadie’ ha servido como pretexto para hablar del impacto de las adicciones en Euskadi y de las consecuencias del narcotráfico en un evento de carácter educativo y divulgativo en la Universidad de Deusto en Bilbao, que acoge un instituto de Drogrodependiencia desde 1989. Durante el acto se ha proyectado un documental sobre la temática.
La película trata sobre la realidad social de quienes las drogas y el narcotráfico “han ocupado su día a día”, así como la importancia de las decisiones que toma cada persona ante esa situación. Según ha explicado el director del largometraje, Albert Pintó, la historia “refleja tres posibles vías, tres posibles escapatorias, a esta problemática, muy distintas y cada una con sus consecuencias”. Cada uno de los protagonistas -Luis Zahera, Karra Elejalde y Jesús Carroza- interpretan una de estas vías.
Según proyecta la película, el narcotráfico es una problemática que afecta no sólo a quienes participan directamente en ella, sin también a quienes, por necesidad o falta de alternativas, se ven atrapados en un sistema que “perpetúa la desigualdad y la precariedad”.
Los productores de ‘Tierra de nadie’, Álvaro Ariza y Maria Luisa Gutiérrez, han explicado que la película destapa la parte “más oscura, menos glamurosa” del narcotráfico, que, inspirada en una persona real, retrata “el abandono institucional y la imagen que se ve de que –el narcotráfico– es más sofisticado, pero que al final, es mucho más humano, mucho más real”.
“Retrata una sociedad en un punto geográfico que podría ser cualquier parte del mundo, donde hay unas historias personales que tienen que ver que en la misma familia, y donde te puedes encontrar que hay guardias civiles, que hay narcotraficantes y que, por supuesto, hay consumidores, porque al final es verdad; sin demanda no hay oferta, sin oferta no hay demanda”, han apuntado.
Además, han querido reflejar “cómo se vive todo ese drama” y el “abandono institucional, porque las instituciones tienen menos recursos que lo que tienen los narcotraficantes”.
EDUCACIÓN
El núcleo del coloquio posterior a la proyección del documental, ha sido la educación para la prevención del consumo de drogas. En este sentido, el productor Álvaro Ariza se ha mostrado sorprendido al constatar que en los institutos o universidades “la juventud no trabaja las emociones”, y es, bajo su punto de vista, en ese ámbito en el que se encuentra la solución, “en la educación y la educación de emociones”.
Sobre la problemática en el consumo, se ha preguntado “¿qué quieren anestesiar?”. “¿ Anestesiar porque ‘hoy está lloviendo y no me gusta, quiero sol’?”, ha añadido. Bajo su opinión, esta “es la parte profunda, la parte más emocional, que es lo que hay que trabajar”.
DOS GRANDES ÁREAS
En esta línea, el director de programas de FAD Juventud, Miguel Ángel Rodríguez, ha expresado que el impacto del narcotráfico en la sociedad “se puede dividir en dos grandes áreas”. Por un lado, “un impacto macro, a nivel social, a nivel económico, cómo el narcotráfico influye negativamente en los valores sociales de las personas que viven en un territorio, en su manera de organizarse, en su economía”, ha explicado.
Por otro, ha proseguido, “desde un punto de vista más personal, más familiar, cómo esa influencia también es relevante y es atacable y dirigible, y es un objeto de trabajo desde áreas vinculadas a la educación y a la prevención de las adicciones”.
De la mano de la educación, Rodríguez ha señalado, partiendo de que “todo es mejorable en la vida y todo siempre tiene margen de mejora”, que en Euskadi “siempre ha habido muy buenos programas y muy buena red de profesionales con un apoyo financiero y económico relevante en comparación con otros lugares del Estado”.
“La prevención es la hermana pequeñita de los presupuestos cuando estamos hablando de control de la oferta. Desde el control de la demanda, que sería un poco lo que hacemos en prevención, siempre estamos muy a la cola del dinero y siempre necesitaríamos más”, ha denunciado.
“NECESIDAD SOCIAL DE CONSUMO”
La vertiente psicológica ha ocupado también una parte del coloquio ya que, la profesora titular de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Deusto, Ana Isabel Estévez, ha introducido la reflexión sobre qué le ocurre a una sociedad para necesitar las adicciones.
“¿Qué nos pasa? ¿Qué dificultades, qué duelos, qué dificultades emocionales tenemos que necesitamos utilizar sustancias para paliar ese malestar emocional?”, ha planteado.
La película ‘Tierra de nadie’, ha añadido, se muestran “los pliegos más humanos, los miedos, los duelos a los que se enfrentan, las relaciones, los vínculos, las amistades” que llevan a las personas a la adicción.
“El consumo es un síntoma en la sociedad de algo que tratamos de tapar, un síntoma de una automedicación, cómo utilizamos y para qué utilizamos las sustancias las personas”, y a eso es a lo que, ha indicado, responde el narcotráfico, con una “necesidad social de consumo”.
El jefe de servicio de adicciones de la Red Salud Mental en Bizkaia, Rodrigo Oorá, ha explicado que “hay una vertiente de las adicciones que tiene que ver con el mercado, con una oferta y una demanda y con todas las cadenas que hacen el suministro, como en cualquier otra actividad económica”.
“A veces, eventos que suceden en países que son muy lejanos nos anticipan consecuencias como el incremento en la disponibilidad, por ejemplo, de opioides, de heroína o las bajadas de precio o casi cadenas de marketing para venderlo, porque influyen en cómo se pone de moda”, ha concluido.
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