OVIEDO, 20 (EUROPA PRESS)
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) ha lamentado este jueves que se haya frenado en el Congreso la creación de la Agencia Estatal de Información y Control Alimentarios, que “serviría de garante de los derechos de los agricultores y ganaderos”. “La salida del lobo del Lespre demuestra que la inclusión fue un error”, añade en nota de prensa.
“La votación hoy en el Congreso de los Diputados de la Ley de Desperdicio Alimentario -una especie de Ómnibus del campo- deja un importante impacto en términos legislativos en el campo. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos ha destacado varios de ellos, principalmente la ratificación del rechazo a la conversión de la Agencia de Información y Control Alimentarios O. A. (AICA) en agencia estatal, lo que la dotaría de más recursos y mayor capacidad para ayudar a agricultores y ganaderos a obtener precios justos”, dicen en el escrito.
Igualmente, califican de “lamentable” que se culmine “el rechazo de PP, Vox, Junts y PNV a esta medida, que se produjo en el primer paso por el Congreso de esta Ley”.
En cuanto a la votación en el Congreso que ha sacado adelante otras medidas de impacto, como la retirada del lobo del Lespre, con los votos de PP, Vox, PNV y Junts per Catalunya, UPA aplaude la medida, “que los ganaderos vienen reclamando desde que se tomó la decisión de establecer el máximo nivel de protección a este depredador que está en expansión en nuestro país y causa graves daños a la ganadería, especialmente a la extensiva”.
“Se demuestra que las decisiones tomadas de espaldas al sector, como lo fue la protección máxima del lobo, terminan sin tener futuro”, argumentan desde UPA. “España debe hacer compatible la presencia de todas las especies con el desarrollo de actividades como es la ganadería, que supone un puntal de la cultura, la sociedad y la economía rural. La protección total nunca fue la solución”, recalcan.
Sobre la Ley de Prevención de Pérdidas de Desperdicio Alimentario, UPA considera que debe contribuir “a que todos los alimentos que se producen en el campo español lleguen a su destino: ser consumidos y no desperdiciados”. “La agricultura y ganadería familiar trabaja cada día para ser más sostenible, y las pérdidas son el peor de los fines para el esfuerzo de nuestro trabajo. Debemos hacer compatible la reducción del desperdicio con la garantía de precios justos para los agricultores en todos los casos”, concluyen desde UPA.
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