Presenta propuestas de mejora
FORMENTERA, 18 (EUROPA PRESS)
El Consell de Formentera ha reiterado este martes su oposición al acuerdo adoptado por el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) en relación al ‘Pliego de bases del concurso público para la gestión y explotación, en régimen de concesión administrativa, de puestos de amarre, locales comerciales y plazas de aparcamiento en el puerto de la Savina (Formentera)’.
El presidente del Consell, Óscar Portas, ha señalado en rueda de prensa que en las últimas semanas se ha trabajado en un documento para remitir a la Autoridad Portuaria y trasladar así las reclamaciones, tanto de las diferentes formaciones políticas, como de las asociaciones integradas en el Consell de Entidades.
Entre otras cuestiones, reclaman una serie de consideraciones para “garantizar el interés general del puerto y de todo lo que representa para el pueblo”. Así, el Consell de Formentera insta a dejar fuera del concurso “toda intervención o posible intervención que no cumpla con el actual Plan Especial del Puerto (PEP) de la Savina”.
Entre estos puntos se incluye el edificio de nueva creación situado al este del puerto, la parcela de Salinera Española o los dos edificios de servicios que acaban el periodo de concesión en 2028.
Otro punto aceptado por todos los partidos es la necesidad de que la adjudicación de este concurso no recaiga sólo en un licitador con la finalidad de “favorecer la libre competencia” y evitar situaciones de monopolio. También se cree que el plazo de concesión propuesto de 25 años es “demasiado elevado”.
El Consell de Formentera insta, a la hora de la resolución del concurso, a tener en cuenta a aquellos licitadores que propongan tarifas más económicas para embarcaciones de menos de ocho metros, entre otras medidas.
Finalmente, desde el Consell de Formentera han señalado que preocupa “especialmente” el componente social del puerto de la Savina, así como el hecho de poner en valor elementos históricos y patrimoniales situados en la zona. Según el Consell, de ahí surge la voluntad de contar con un espacio para una sede social destinada a entidades sin ánimo de lucro, clubs y asociaciones.
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