MADRID, 14 (SERVIMEDIA)
El 45% de los hogares encuentra “difícil o muy difícil” afrontar los gastos de vivienda y al 42% le ocurre igual con los de alimentación, especialmente la carne y el pescado.
Así lo desvela el ‘Estudio de Solvencia familiar’ publicado este viernes por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), un análisis que revela “mejoras” después de meses de inflación “desbocada”, pero que, “sin embargo, también ha ahondado las desigualdades entre los hogares”, según precisó la entidad en un comunicado, coincidiendo con la conmemoración, este sábado del Día Mundial de los Derechos de los Consumidores.
El estudio recoge la experiencia de una muestra representativa de la población española de entre 25 y 79 años, formada por 2.620 personas, con el fin de analizar su capacidad para afrontar 37 partidas básicas de gasto doméstico agrupadas en las áreas de vivienda, alimentación, salud, educación, movilidad y cultura, ocio y tiempo libre.
El resultado general de la valoración objetiva de todas las partidas y su impacto sobre la calidad de vida de los hogares es el Índice de Solvencia Familiar y, según la OCU, a pesar de la “mejoría” de dicho índice, que ha subido de 46 puntos en 2023 a 47,4 puntos en 2024, el dato sigue siendo inferior al de 2019, cuando alcanzaba los 48,7 puntos y está “muy lejos de los 52,5 puntos de 2020”.
“Un resultado que, de momento, acompaña los buenos datos macroeconómicos de la economía nacional”, resaltó la OCU, al tiempo que indicó que, sin embargo, pese a la “mejoría”, las previsiones de las familias “no son optimistas”, dado que solo el 18% cree que su economía doméstica va a mejorar este año, frente al 30% que opina que 2025 será peor que 2024.
POR REGIONES
El estudio de OCU refleja “importantes diferencias” según la comunidad autónoma de residencia de los encuestados y Andalucía, Castilla-La Mancha, Baleares, Madrid, Extremadura y Canarias son, por este orden, las regiones con un peor índice de solvencia familiar, inferior a los 47 puntos.
Por su parte, La Rioja y Navarra superan los 50 puntos, si bien esta última autonomía ha experimentado una ligera bajada respecto al año pasado, lo mismo que Aragón y Extremadura.
En paralelo, la entidad agregó que las diferencias entre hogares “también parecen ampliarse” y explicó que, aunque ha subido hasta el 33% el porcentaje de familias con un nivel alto de confort financiero, aquellas que no tienen dificultades para afrontar los gastos cotidianos, también han aumentado el grupo de familias con un bajo confort financiero, hasta el 16%.
“Lo que confirmaría un estrechamiento del número de hogares que podrían considerarse como clase media, que ahora suma el 51%, cuando en 2018 representaba el 63%. Es más, si bien las dificultades para ahorrar han disminuido ligeramente, siguen siendo habituales para el 69% de los hogares”, prosiguió la OCU.
Por partidas, las que corresponden a las áreas de vivienda y alimentación siguen siendo las “más difíciles de afrontar”, si bien se observan “dificultades en la gran mayoría de los gastos domésticos”.
GASTOS MÁS IMPORTANTES
Entre los gastos más importantes para las familias destacan los asociados al automóvil (al 48% de los hogares les resulta difícil o muy difícil pagarlos), del dentista (el 46% de los hogares), los suministros de gas, luz y agua (36% de los hogares), la compra de gafas y audífonos (34% de los hogares), la hipoteca (27% de los hogares) o los gastos en salud mental (23%).
Para la organización, también “llama la atención” otra partida “aparentemente trivial”, pero “igualmente importante” para los entrevistados, como es la de las vacaciones y, en este sentido, al 52% de hogares les resulta difícil o muy difícil de afrontar,
A juicio de la OCU, “capítulo aparte merecen los gastos en alimentación”, teniendo en cuenta que al 33% de las familias les resulta difícil o muy difícil de afrontar la compra de frutas y verduras y para el pan, la pasta, el arroz, el aceite y los lácteos le sucede al 30% de las familias al igual que también al 42% con la carne y el pescado, considerados casi como un lujo en muchos hogares.
Ante esta situación, OCU insistió al Gobierno en la importancia de reducir el IVA del 4% al 0% para los alimentos básicos, incluida la carne y el pescado, actualmente sujetos al 10%.
Del mismo modo, y en el área de vivienda, insistió en la necesidad de facilitar los acuerdos con las entidades bancarias para reducir cuotas mediante la ampliación de plazos o concesión de moratorias para las familias con dificultades para pagar la hipoteca.
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