Las organizaciones empresariales del sector de comercio de ambas regiones han celebrado este martes una reunión en la sede de la FER
LOGROÑO, 11 (EUROPA PRESS)
La Federación de Empresas de Comercio de La Rioja (FER Comercio) y la Confederación de Comercio de Castilla y León (CONFERCO) han celebrado este martes en la sede de la FER un encuentro estratégico para analizar la situación que enfrenta el comercio de proximidad y definir líneas de actuación conjuntas en su defensa.
Como han reseñado los presidentes de ambas organizaciones, el riojano Fernando Cortezón y el castellano-leonés Adolfo Sáinz, el comercio minorista de ambas comunidades se encuentra “en un momento crítico, afectado por la competencia de las grandes superficies, el auge del comercio online, la despoblación o el envejecimiento de la población, entre otras cuestiones”.
En este contexto, ambas organizaciones han reafirmado su compromiso de trabajar conjuntamente para impulsar soluciones efectivas que garanticen la viabilidad del sector.
Así, durante la reunión, han abordado los problemas más acuciantes del comercio de proximidad, entre ellos “la pérdida continua de establecimientos, la falta de relevo generacional en los negocios, la creciente competencia de las grandes plataformas digitales y el impacto de la reducción de la jornada laboral en la viabilidad de los pequeños comercios”.
Ante esta situación, ambas organizaciones han subrayado la necesidad de reclamar a las diferentes administraciones más presupuesto para mejorar la competitividad del sector, lo que incluiría medidas como programas de formación o planes de digitalización e innovación, a lo que han sumado la importancia de fomentar “el asociacionismo”, con el “papel fundamental de entidades como CONFERCO y FER como instrumento clave para el éxito de estas políticas”.
EL SECTOR.
El comercio es un pilar estratégico en Castilla y León, con más de 35.000 empresas dedicadas a esta actividad (representando el 22,5% del total empresarial), 43.000 locales comerciales en funcionamiento y una aportación del 9% al PIB regional.
Por su parte en La Rioja se cuenta con unos 5.000 establecimientos, que representan un 13% del PIB regional, aunque, como ha advertido Cortezón, “en los últimos cinco años han desaparecido entre 150 y 200 comercios cada año”, ante lo que ha afirmado que “hay que tomar medidas para frenar esta sangría”.
El sector más afectado es de del equipamiento de la persona, con una disminución de las ventas del 19,6% entre 2019 y 2023. El crecimiento también es menor que el promedio nacional.
En el encuentro, ambas organizaciones han coincidido en que “el comercio local debe adaptarse a las nuevas demandas de la sociedad mediante la digitalización y la modernización de sus estructuras”. No obstante, para que esta transformación sea efectiva, “es imprescindible contar con el respaldo de las administraciones públicas”.
En palabras de Adolfo Sáinz, “la administración local, la administración regional tienen que apoyarnos, pero a nivel nacional, por ejemplo el tema de la ayuda de ahora con el tema de la reducción de la jornada laboral, a nosotros nos afecta muchísimo”.
“El pequeño comercio junto con hostelería quizás seamos de los sectores que más nos afecta esta reducción de la jornada laboral, por eso nosotros nos oponemos rotundamente a esta reducción”, ha asegurado el responsable de la patronal del comercio en Castilla y León.
A ello ha sumado que “nos tienen que ayudar en el tema de controlar el IPC, la cesta de la compra, se nos ha ido de las manos a todos, a nosotros no nos favorece cuando los costos están más caros” y “el tema de la subida de los salarios mínimos, que nos afecta también mucho porque en seis años ha subido un 60%”.
“Hay medidas a nivel nacional, de política nacional, que se tienen que hacer y no se están haciendo. No se está haciendo bien. El tema del alquiler, de las rentas de los alquileres, están por las nubes también. Las materias primas, cómo ha subido el gasoil, cómo ha subido la electricidad. Casda administración tiene su responsabilidad”, ha argumentado.
En este contexto, los responsables de las patronales del comercio han considerado que “el asociacionismo es una herramienta clave en la consecución de estos objetivos”. La unión de los comerciantes bajo estructuras organizadas permite tener una voz más fuerte ante las administraciones, acceder a ayudas y programas específicos y fomentar la cooperación entre empresas para mejorar su competitividad.
RECLAMACIONES.
Desde FER Comercio y CONFERCO se defiende que el comercio debe ser reconocido como un sector estratégico y se demanda que se visibilice su importancia tanto a nivel económico como social.
Las organizaciones de comerciantes de La Rioja y Castilla y León reclaman por todo ello a las administraciones “apoyo urgente para el pequeño comercio, dado este papel estratégico en la economía y la vida local”.
Solicitan “un plan a largo plazo que defina el modelo de comercio y ciudad, acompañado de medidas regulatorias específicas, como la reducción de impuestos, ayudas directas y bonificaciones en la Seguridad Social, especialmente en el ámbito rural”. Proponen, también, la creación de un Observatorio de Comercio y un ‘Día del Comercio Local’ para visibilizar su importancia.
Además, exigen más presupuesto para modernización, digitalización y promoción comercial, así como para campañas de sensibilización sobre el consumo local. Piden el respaldo para la formación de empleados y desempleados en sectores especializados y medidas para facilitar el relevo generacional.
Han participado en este encuentro por parte de FER Comercio, su presidente Fernando Cortezón ; los miembros de la junta directiva Rodrigo Hernández, Diego Ferrer, Fran Maeztu, Javier Rioja y la secretaria general, Adelaida Alútiz.
Por parte de CONFERCO, su presidente y presidente de FEC Soria, Adolfo Sainz; la secretaria de FEC Burgos, Loli Peraita; el miembro de la junta directiva de FEC Burgos, David Ruiz y Miguel Soria, secretario de CONFERCO y FEC Soria.
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