MADRID, 27 (SERVIMEDIA)
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, pidió este jueves al Gobierno dialogar sobre el calendario de cierre de las centrales puesto que considera que ante el retraso en la implantación de sistemas de almacenamiento y baterías se podrían producir problemas con el suministro eléctrico entre 2030 y 2035, especialmente en Cataluña.
Así se expresó Bogas en una rueda de prensa de presentación de los resultados de la compañía en 2024, año en que ganó 1.888 millones de euros, un 154% más. Bogas, tras recordar que siempre se ha manifestado “intelectualmente” a favor de la nuclear, defendió que las circunstancias existentes cuando se firmó el acuerdo en 2019 “son muy distintas a las que hay hoy”.
“La COP 28, la COP 29 y la Comisión Europea han cambiado su posición”, defendió Bogas, quien recordó también que la Agencia Internacional de la Energía ha señalado la necesidad de duplicar la potencia nuclear que hoy existe para poder alcanzar el Net cero en 2050.
Por ello, sostuvo que “Hay un cambio respecto a la política nuclear en el mundo” y aportó los ejemplos de Bélgica, que ha replanteado su calendario de cierre; Italia, que se plantea construir pequeños reactores, o Alemania, que se plantea reabrir sus reactores.
“Todo eso nos lleva a expresar nuestro deseo de discutir los pros y los contras de variar las fechas que hoy están establecidas en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec)”, reiteró Bogas.
A este respecto, advirtió de que “hoy en día en España la energía nuclear soporta cargas fiscales muy elevadas”, que cifró en 28 euros por megavatio, que “impiden que en un Corto espacio de tiempo puedan generar los ingresos necesarios para poder pagar los costes de desmantelamiento y de gestión de los residuos”.
De hecho, denunció que “el coste de la nuclear no es competitivo”, aunque defendió que “quitando las cargas fiscales sería una de las más competitivas”. También señaló que ampliar su vida útil no encarece “prácticamente” los costes de desmantelamiento y de gestión de los residuos.
“Es el momento de ver si seguimos adelante con el plan de cierre y si eso es en el Bien de la economía, de las emisiones, de la competitividad y de los precios para los consumidores y los industriales”, concluyó.
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