BRUSELAS, 26 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea ha propuesto este miércoles reducir las obligaciones ambientales que exigen a las empresas informar del impacto de su actividad en el medio ambiente para aliviarlas de carga burocrática, abaratar costes e impulsar su competitividad frente a competidores como China o Estados Unidos.
“Las propuestas de simplificación de hoy contribuyen a garantizar que las empresas europeas responsables puedan seguir invirtiendo y haciendo negocios en todo el mundo. La alternativa es retirarse y ceder terreno a competidores que no comparten nuestros valores ni métodos de trabajo”, ha apuntado en rueda de prensa el comisario europeo de Economía y Simplificación, Valdis Dombrovskis.
Este paquete, que Bruselas ha bautizado como ‘Ómnibus’, afecta a cuatro marcos regulatorios europeos relacionados con las obligaciones de las empresas de dar parte del impacto de su actividad, algunos de los cuales prevén multas y sanciones para las compañías que socaven los derechos humanos y el medio ambiente.
En concreto, se trata de la directiva sobre informes de sostenibilidad (CSRD, por sus siglas en inglés); el reglamento de taxonomía de la UE –que establece la clasificación de actividades económicas sostenibles–; la directiva sobre diligencia debida (CSDDD) y el mecanismo de ajuste de carbono en la frontera (CBAM), conocido como ‘arancel climático’.
INFORMES CLIMÁTICOS SOLO PARA EMPRESAS DE MÁS DE 1.000 EMPLEADOS
Entre los cambios propuestos, el político letón ha destacado que se eximirá de realizar informes climáticos a un 80% de las empresas que cubre la actual directiva CSRD al limitar estas obligaciones a las compañías de más de 1.000 empleados y se retrasará la aplicación de esta directiva para las empresas que aún no han empezado a informar.
Además, se reducirán las obligaciones de las pequeñas y medianas empresas (pymes) de realizar informes en base a la taxonomía de la UE.
Bruselas también propone simplificar los requisitos de la directiva de diligencia debida en materia de sostenibilidad limitando las solicitudes de información a los socios directos, reduciendo la frecuencia de las evaluaciones y, según han añadido fuentes comunitarias, eliminando el límite mínimo de sanciones financieras como parte de la aplicación administrativa, que se había fijado en el 5% del volumen de negocios.
ARANCELES CLIMÁTICOS
Por otro lado, se eximirá de aranceles climáticos a los importadores ocasionales de pequeñas cantidades en los sectores de hierro, acero, aluminio, cemento y fertilizantes con la introducción de un nuevo umbral ‘de minimis’ de 50 toneladas.
“Con el nuevo umbral eliminamos las obligaciones para aproximadamente 182.000 importadores, el 90% de los cuales son pymes”, ha destacado Dombrovskis, que estima un ahorro de unos 1.120 millones de euros, sin dejar de cubrir más del 99% de las emisiones”, así como un ahorro de costes para las autoridades públicas de los Estados miembro por valor de cerca de 87,5 millones.
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