En el último año, se produjeron casi 800 agresiones a sanitarios, la mayoría verbales, un 10% más que en 2023
ZARAGOZA, 21 (EUROPA PRESS)
El Plan de prevención frente a agresiones externas en el lugar de trabajo y atención a profesionales del sistema sanitario público de Aragón, trabajado y consensuado con los representantes de los profesionales, se encuentra en las últimas fases para su aprobación.
Este documento, que actualiza el plan anterior, de 2005, se ha presentado este viernes, en la Mesa Técnica de Agresiones y está prevista su ratificación, también este viernes, en la reunión de la Comisión Sectorial de Prevención de Riesgos Laborales del Servicio Aragonés de Salud. La aprobación definitiva tendrá lugar en los próximos días, en la Mesa Sectorial de Sanidad, y entrará en vigor una vez se publique en el Boletín Oficial de Aragón (BOA), ha informado el Gobierno autonómico.
La Mesa Técnica de Agresiones ha conocido también el balance de agresiones notificadas en 2024 por trabajadores del Salud al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales de este organismo.
El año pasado, se registraron 795 actos violentos contra los profesionales sanitarios aragoneses, un 10,11% más sobre 2023, cuando hubo 722 comunicaciones.
La jefa del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Salud, María Antonia Contreras, ha manifestado que se ha mejorado el procedimiento de comunicación de las agresiones para los trabajadores, que en muchos sectores ya es de forma telemática, y se está dando formación e información a trabajadores y mandos intermedios.
Asimismo, ha comentado que en 2024 las mayores incidencias de agresiones ha sido las verbales, con 564 notificaciones, lo que representa el 70,94% del total. Por su parte, las físicas han sumado 231, el 29,06%.
Esto supone que han crecido las verbales y han bajado las físicas respecto a 2023, cuando representaron el 65% y 35%, respectivamente. De las notificaciones verbales, 30 de ellas (3,77%) corresponde a agresiones telefónicas, bien en los puntos de admisión e información, bien en consultas.
NIVEL ASISTENCIAL
En cuanto a nivel asistencial, el número de agresiones comunicadas en atención hospitalaria han sido 531, frente a las 264 de Atención Primaria y extrahospitalaria. No obstante, puesto que la plantilla en los centros de salud es menor al 20% del total, esto significa que este colectivo está notablemente más afectado.
La jefa del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales del SALUD también ha especificado que con respecto a 2023, se ha observado un incremento en las agresiones en el nivel asistencial hospitalario con respecto al de Atención Primaria.
Dentro de las distintas categorías laborales, el personal de Enfermería ha sido el que mayor número de agresiones ha registrado, con 290, seguido del personal médico, con 186; de los Técnicos de Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE), con 196; administrativos, con 69; celadores, con 29, y otras categorías, con 25.
No obstante, teniendo en cuenta el número total de trabajadores de cada categoría, los profesionales de Enfermería poseen el porcentaje más alto de agresiones notificadas por número de profesionales, el 36,48%, seguidos por los TCAE, 24,65, y los médicos, el 23,40%.
Del total de agresiones, 682 –85,79%– han sido dirigidas hacia mujeres y 113 –14,21%– hacia hombres, lo que indica que existe un sesgo de género contra las mujeres, ya que suponen menos del 80% de la plantilla.
En cuanto al rango de edad con más incidencia, el 27,54% de los profesionales agredidos tenían una edad comprendida entre 25 y 35 años, seguidos por los intervalos de 36 a 45 años y de 46 a 55 años.
CAUSAS
Dentro de las distintas causas de la agresión, 267 actos violentos han estado relacionados con el propio acto administrativo o sanitarios, seguido en número por las relacionadas con la atención percibida por el usuario –230–, la demanda de los pacientes –203– y aquellas causas ajenas a la organización o a la asistencia prestada –95–.
En cuanto al lugar donde se producen las agresiones, los escenarios donde mayor número de incidencias suceden son hospitalización, consultas, urgencias, unidades de salud mental y psiquiatría, puntos de información y admisión, domicilios y vía pública, por este orden.
Sobre el perfil del agresor, el 54,97% han sido hombres y el 45,03% mujeres y lo habitual es que haya sido el propio paciente –70,57%– la persona que agrede al profesional o un familiar –29,43%–, de los cuales son 232 reincidentes, es decir, han realizado de forma reiterada actos violentos en el área asistencial y se tiene registro de esa conducta.
En este punto, el nuevo plan aboga por la tolerancia cero a las agresiones a profesionales de la salud, con el impulso de campañas de difusión en este sentido.
Girará en torno a cuatro líneas estratégicas: adecuación y creación de espacios libres de violencia; formación, información y capacitación de los profesionales; asesoramiento y apoyo al profesional agredido; y notificaciones y registro de incidentes.
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