MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
La presidenta del Consejo de Estado, Carmen Calvo, advirtió este lunes de que “el machismo es fascismo y este es un rostro del fascismo que vuelve” y criticó la intención expresada por el presidente de EEUU, Donald Trump, de “proteger” a las mujeres “quieran o no”.
Así lo alertó en declaraciones a los medios de comunicación a su llegada al acto por el 20º aniversario de la Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, que se celebra en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.
“Vamos a proteger a nuestras mujeres; es decir, las mujeres seguimos siendo pertenencia, según él, de los hombres, y ‘quieran o no’; es decir, no tenemos ni voluntad ni libertad”, afeó, al tiempo que consideró que esta postura “es un destrozo de la idea de que las mujeres somos ciudadanas de nuestros respectivos Estados, ciudadanas del mundo”.
A este respecto, Calvo subrayó que la “lucha” de las mujeres “lleva más de 200 años peleando por alcanzar reconocimiento de nuestros derechos, protección de nuestras libertades, avance de nuestras necesidades” y lamentó que “alguien desde la caverna más absoluta dice ‘vamos a proteger a nuestras mujeres quieran ellas o no'”.
No obstante, reconoció que esta es “una de las muchas cosas que venimos escuchando”, lo cual, a su entender, “significa que el rostro del nuevo fascismo es claramente machista”.
SIN AMBAGES
“Siempre lo ha sido, pero ahora es que lo es sin ambages, sin tener el más mínimo cuidado de que no lo parezca”, puntualizó, convencida de que “la democracia en general, las mujeres que luchamos, pero a muchos hombres demócratas, hay que decirles que lo que hay al fondo de esto son hombres machistas, con unas dificultades enormes para respetarnos a las mujeres”.
“Esto no es nuevo”, sentenció, al tiempo que subrayó que Virginia Woolf ya describió a Hitler “como una verdadera bestia, machista, incapacitada para entender a las mujeres”. “Ella puso el dedo en la llaga en otro momento de la historia, así que espabilemos mucho y espabilen también mucho los hombres demócratas”, reclamó, consciente de que “lo que hay debajo” de “este modelo de varones” es “patriarcado antes incluso que la bis fascista claramente que tienen en muchas de esas apreciaciones que hacen contra nosotras”.
Por todo ello, urgió a “hombres y mujeres” a que “no se despisten en esto”, porque, a su entender, “el machismo es fascismo y este es un rostro del fascismo que vuelve”.
En la misma línea, estimó la necesidad de “ponerle más cascabeles políticos a todo esto”, sabedora de que “lo que nos estamos jugando son mujeres asesinadas, nada más y nada menos”, razón por la cual confesó que tiene “la sensación de que hace falta menos teoría y más práctica” para erradicar esta lacra.
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