MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Las autoridades francesas han colocado este viernes una pulsera electrónica de vigilancia al expresidente Nicolas Sarkozy, que gracias a esta medida podrá evitar entrar en prisión por un caso de corrupción y tráfico de influencias por el que el Tribunal de Casación le condenó el pasado mes de diciembre.
El Alto Tribunal galo ratificó la sentencia impuesta en instancias inferiores, que implicaba dejar en suspenso tres de los años de pena y evitar entrar en la cárcel por otro año, siempre y cuando aceptase la vigilancia. Sobre el antiguo mandatario también pesa una inhabilitación política durante tres años.
Las nuevas medidas implican que, por norma general, Sarkozy deberá permanecer en su domicilio entre las 20.00 y las 8.00, un horario que las autoridades vigilarán mediante un sistema instalado este viernes por la tarde, según fuentes de la Fiscalía citadas por varios medios como Franceinfo o BFM TV.
La Justicia gala considera probado que Sarzoky, de 70 años, se sirvió de su posición para tratar de obtener información sobre una investigación judicial que le afectaba. Los intermediarios, el abogado Thierry Herzog y el exjuez Gilbert Azibert, fueron también condenados en este proceso.
- Te recomendamos -
