SANTA CRUZ DE TENERIFE, 5 (EUROPA PRESS)
La Consejería de Presidencia, Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad ha colaborado con el Programa de Cooperación para la Seguridad y Emergencias en Gambia de la ONG StarUp, que cuenta con la implicación del Ministerio de Interior gambiano y del Cuerpo General de la Policía Canaria.
De esta forma, el agente especializado en esta materia, Joel Lorenzo, se ha trasladado a este país africano para impartir formación a una veintena de agentes policiales, debido al riesgo de violencia contra las mujeres y niños que se producen en lugares de desarrollo turístico.
La consejera Nieves Lady Barreto destaca en una nota que esta colaboración pone de manifiesto “el alto nivel de preparación” de la policía autonómica y apuesta porque este tipo de colaboraciones se sigan produciendo en el futuro en todos los ámbitos en los que los conocimientos y experiencias del Cuerpo General de la Policía Canaria sea de utilidad.
El ministro de Interior de Gambia, Abdoulie Sanyang, subrayó que el turismo es sin duda una piedra angular en la economía de lugares como Gambia toda vez que está llamado a impulsar su crecimiento, pero su impulso conlleva la responsabilidad de garantizar que esas áreas turísticas sean seguras, particularmente para mujeres y niños, los más vulnerables, recoge una nota de la Consejería.
La responsable de la ONG StarUp, Sonja Arup, que desarrolla en Canarias el programa Clave-A de protección a la infancia, explica que ha querido dar en Gambia el primer paso para formar a las unidades de emergencias y seguridad con el objetivo de luchar contra el turismo sexual, puesto que el objetivo final de su programa es contribuir a sentar las bases que atraigan inversores y con ello empleo y desarrollo.
La capacitación preparada por Joel Lorenzo para impartir a 20 agentes durante 20 horas proporcionó el conocimiento y las herramientas necesarias tanto para prevenir como para responder a la violencia en zonas turísticas.
“No se trata sólo de abordar los problemas cuando ocurren, sino de fomentar la prevención, seguridad y respeto”, subrayó Lorenzo.
En esa línea dijo que es una “oportunidad” tener esta experiencia de compartir con los “colegas gambianos” todo el conocimiento adquirido durante los últimos años en el ámbito de los menores de edad.
“Conocemos la difícil situación de los países africanos y el convencimiento del Gobierno gambiano por mejorar su situación. Creemos firmemente que el gran crecimiento de la Policía Canaria puede ayudar al desarrollo policial de Gambia”, subrayó Joel Lorenzo.
SEÑALES DE ABUSO
La formación impartida por el agente canario comenzó por la descripción de las formas más comunes de violencia infantil, sea psicológica o física, incluidas la explotación laboral y sexual, el abandono y negligencia parental, tráfico de menores, matrimonios forzados, captación por parte de bandas criminales e incluso la mutilación genital femenina en el caso de muchos países africanos.
Así, es importante reconocer las señales que indican que un menor puede estar siendo víctima de maltrato físico, tales como quemaduras, mordeduras, ojos negros e incluso huesos rotos.
Son marcas que pueden presentar tras un periodo de ausencia del colegio a las que se suman depresión y ansiedad, normalmente no quieren volver a casa por miedo a sus padres si son los agresores, no duermen bien y tiemblan cuando están cerca de estos adultos.
En el caso de los abandonos, explica Lorenzo, en España es detectado por el hambre constante, higiene deficiente, ausencias del colegio, la comisión de actos delictivos e incluso por llegar muy pronto o salir muy tarde del colegio.
Los menores huérfanos son en su caso la diana prioritaria para el tráfico de niños, la falta de apoyo familiar y la facilidad para manipularlos los convierte en muy vulnerables.
En el caso de refugiados o migrantes que pasan por Gambia, a veces no saben ni en qué lugar están, no suelen compartir demasiada información y su comportamiento es esquivo.
El agente canario compartió, asimismo, el procedimiento para entrevistarse con menores, siempre con máximo respeto al menor y con uso de un lenguaje acorde a su edad y situación.
Finalmente expuso el protocolo canario de recogida de información en los exhaustivos informes que se envían a Fiscalía de Menores y la Dirección General de Protección de la Infancia, entre los que también ha habido casos de migrantes a los que intentan conseguirles la mejor situación posible.
- Te recomendamos -