MADRID, 05 (SERVIMEDIA)
El estereotipo de que las mujeres son mucho más comunicativas que los hombres está muy extendido en muchas culturas, pero una nueva investigación indica que ellas hablan más que ellos sobre todo cuando tienen entre 25 y 65 años.
Un equipo de investigadores refutó ese estereotipo en un estudio ampliamente difundido en 2007, cuando afirmaron que los hombres y las mujeres hablan aproximadamente la misma cantidad de palabras al día, alrededor de 16.000.
Un nuevo y más amplio seguimiento de ese trabajo, publicado en la revista ‘Journal of Personality and Social Psychology’, presenta un panorama más matizado y sugiere que las mujeres pueden ser el género más comunicativo, pero solo durante un cierto período de la vida.
“Existe una fuerte presunción intercultural de que las mujeres hablan mucho más que los hombres”, indica Colin Tidwell, doctorando en psicología clínica en la Universidad de Arizona, quien añade: “Queríamos ver si esta presunción se cumple o no al ponerla a prueba empíricamente”.
Los investigadores descubrieron que las mujeres de entre 25 y 65 años (la edad adulta temprana y media) hablaban en promedio unas 3.000 palabras más por día que sus contrapartes masculinas.
No aparecieron diferencias significativas de género en los otros grupos de edad del estudio: adolescencia (de 10 a 17 años), adultez emergente (de 18 a 24 años) y adultez avanzada (65 años y más).
Los investigadores también descubrieron que las personas, en general, podrían estar volviéndose menos comunicativas, un hallazgo que sospechan está relacionado con una dependencia creciente de la comunicación digital.
PREGUNTA PERSISTENTE
Matthias Mehl, psicólogo de la Universidad de Alberta (Canadá), puso a prueba en 2007 la suposición común de que las mujeres son mucho más comunicativas que los hombres al analizar datos recopilados de 500 participantes masculinos y femeninos en un estudio para el que se empleó un dispositivo de grabación portátil denominado EAR (grabadora activada electrónicamente) que se enciende a intervalos aleatorios para capturar fragmentos de conversaciones diarias.
A partir de esos archivos de audio, Mehl elaboró estimaciones del número de palabras que pronuncia una persona al día. Su análisis, publicado en la revista ‘Science’, no reveló ninguna diferencia significativa entre los sexos, pero ese hallazgo se difundió entre los medios de comunicación.
No obstante, esa investigación generó críticas por sus limitaciones, ya que sus participantes eran casi todos de edad universitaria y la mayoría vivía en la misma ciudad: Austin.
CRIANZA DE HIJOS
Dieciocho años después, Mehl y sus colaboradores (entre ellos Colin Tidwell, Valeria Pfeifer y Alexander Danvers, de la Universidad de Arizona) intentaron replicar los hallazgos originales con una muestra más grande y más diversa.
Analizaron 630.000 grabaciones EAR de 22 estudios separados realizados en cuatro países, con participantes de entre 10 y 94 años. El análisis incluyó a 2.197 personas, cuatro veces más que el original.
Solo surgió una diferencia de género significativa para un grupo de edad: los de 25 a 64 años, un rango de edad que no se había incluido en el estudio original de estudiantes universitarios.
Así, las mujeres del grupo de edad de la adultez temprana a media hablan 21.845 palabras diarias de promedio, mientras que los hombres pronuncian 18.570.
Los investigadores desconocen con seguridad por qué las mujeres hablan más en esa franja de edad, aunque sugieren que suelen ser los años de crianza de los hijos y las mujeres, que a menudo asumen el papel de cuidadoras principales, podrían hablar más que los hombres con sus retoños durante ese tiempo.
“Las diferencias relacionadas con el género en la crianza de los hijos y el cuidado de la familia son una posibilidad que podría explicar esta diferencia”, indica Mehl, autor principal del estudio y ahora profesor del Departamento de Psicología de la Universidad de Arizona.
Mehl añade: “Si los factores biológicos como las hormonas fueran la causa principal, también debería haber existido una diferencia de género considerable entre los adultos emergentes. Si los cambios generacionales sociales fueran la fuerza impulsora, debería haber habido una diferencia de género gradualmente creciente con los participantes de mayor edad. Sin embargo, no fue así”.
DIFERENCIAS
Si bien las mujeres pueden ser más comunicativas que los hombres en algunos momentos de la vida, Mehl difiere entre individuos de ambos sexos. La persona menos comunicativa del estudio (un hombre) dijo cerca de 100 palabras al día, mientras que el participante más locuaz (también hombre) empleó más de 120.000.
“Nosotros, los humanos, somos mucho más diferentes individualmente que los dos géneros sistemáticamente”, sentencia Mehl.
Al analizar a todos los participantes del estudio, independientemente del género o la edad, los investigadores también descubrieron que el número promedio de palabras pronunciadas por día parece haber disminuido con los años.
Los datos analizados para el trabajo se recopilaron entre 2005 y 2018, periodo durante el cual el número promedio de palabras pronunciadas al día se redujo de unas 16.000 a cerca de 13.000.
“Realizamos un análisis completo teniendo en cuenta el año en que se recopilaron los datos y descubrimos que, en efecto, se pierden unas 300 palabras habladas de media por año”, subraya Pfeifer.
Mehl recalca que es probable que el aumento de las herramientas de comunicación digital, incluidos los mensajes de texto y las redes sociales, sean parte de esa ecuación de hablar menos.
“Me fascina la idea de que sabemos cuánto necesitamos dormir, cuánto ejercicio necesitamos y la gente lleva Fitbits todo el tiempo, pero no tenemos idea de cuánto se supone que debemos socializar. Hay evidencia muy sólida de que socializar está vinculado a la salud, al menos en la misma medida que la actividad física y el sueño. Es simplemente otro comportamiento saludable”, concluye Mehl.
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