Inicio España Miguel Ángel Rodríguez afirma que las mujeres son más fuertes en las...

Miguel Ángel Rodríguez afirma que las mujeres son más fuertes en las catástrofes

0

MADRID, 02 (SERVIMEDIA)

El periodista y trabajador humanitario Miguel Ángel Rodríguez, autor del libro ‘Cartas desde el infierno’, “un viaje entre el horror y la esperanza”, que se presentará el próximo 12 de febrero en la Biblioteca Nacional, resalta en una entrevista con Servimedia que “las mujeres son más fuertes en las catástrofes”.

Rodriguez, que cuenta con 20 años de experiencia en distintas emergencias y crisis humanitarias ocasionadas por catástrofes naturales, epidemias y conflictos armados, alaba “la resiliencia de las mujeres ante el horror”, y confiesa que su ‘talón de Aquiles’ es “ver sufrir a los niños”.

“No sé explicar muy bien el motivo pero creo que, de alguna forma, la mujeres tienen en su ADN un componente de resiliencia, de ‘saber sufrir mejor’. Históricamente arrastran un mayor castigo y exclusión que siempre han sabido compaginar con un mayor cuidado de la familia y de la comunidad. Llevan una mochila más pesada, en general, y eso ha quedado grabado de alguna forma en sus genes. A lo mejor es una burrada lo que digo, pero es lo que pienso”, argumentó el trabajador humanitario.

Leer más:  Por Talento Ecuador invita a trabajar en favor de la empleabilidad de personas con discapacidad para promover su autonomía e independencia

Ha vivido tantos infiernos que le cuesta señalar cuál fue el peor, el que se presenta en sus pesadillas, por el que más ha sufrido, el que sigue escondido en algún lugar de su cerebro.

“El dolor que peor gestiono es el causado directamente por la mano del hombre, como en los conflictos armados y otras situaciones de violencia. Ahí no hay una ‘maldición’ divina a la que echarle la culpa, ahí nos lo hemos ocasionado nosotros mismos y, muchas veces, desde la mayor de las crueldades, sin piedad. No sabría decirte un abismo específico del que más que ha costado salir, son personas con nombres que tengo grabadas muy adentro, en distintos contextos”.

Sin embargo, el periodista acabó recordando uno de los peores horrores vividos. “Hay un hecho puntual del que nunca he logrado escribir y no creo que lo haga nunca: los atentados del 11-M en Madrid. De alguna forma creo que mi cerebro lo ha archivado en algún lugar remoto. Tengo imágenes muy borrosas de esos días de marzo, sobre todo recuerdo sonidos de esa primera noche en Ifema”.

Leer más:  Expertos solicitan protocolos accesibles y una mayor coordinación para prevenir situaciones de exclusión durante emergencias

Rodríguez explica que “el principal objetivo del libro es tratar de visibilizar a esas personas, muchas veces anónimas, que, ante una situación extraordinaria como una guerra o un desastre, marcan la diferencia. Hablar de esa chispa, luz, esperanza, o lo que sea, que brilla más fuerte que los abismos, a veces creados por nosotros mismos”, pero también reconoce que “escribir, plasmar en tinta lo que veo, me ayuda de alguna forma a sobrellevar situaciones o hechos que a veces me rompen”.

SUFRIMIENTO INFANTIL

Y lo que más le rompe es ver sufrir a los niños. “El sufrimiento de los mayores lo suelo saber gestionar, más o menos. No entiendo el dolor que se le causa a los seres más vulnerables y a los que se supone que tendríamos que proteger siempre”.

Defiende el autor de ‘Cartas desde el infierno’ que el tono de cada una de las misivas varía mucho “en función de mi estado de ánimo en ese momento” y asume que otras muchas más “se han quedado en ordenadores, en cuadernos o en notas sueltas en los libros con los que viajo. ¿Por qué? A veces había mucha rabia en ellas y creo que no aportaban, no sumaban, podían incluso llevar a un pesimismo que no comparto”.

Leer más:  La Policía Nacional está investigando la desaparición de una mujer de 78 años en Logroño

Y enseguida añade que nunca ha ocultado “las miserias. Hay que ser conscientes de ellas para tratar de cambiarlas. Puede que ofrecer información no sea la solución a muchos problemas, pero, sin ella, desde luego que no hay solución alguna”.

El motor de creación del periodista y trabajador humanitario, lo que le mantiene y le anima a seguir, es la esperanza. “Por muy oscuro que sea el abismo, mientras haya una persona que ayude a otra, a veces incluso a costa de su propia vida, habrá siempre esperanza. Es ese brillo en la oscuridad que me permite seguir teniendo fe en el ser humano. Puede que los derechos humanos en muchos países se encuentren en cuidados intensivos, pero tenemos muy buenos cirujanos. Los he conocido, trabajo con ellos y ellas”, concluye.


- Te recomendamos -