Junts reprocha a Collboni su gobierno “frívolo” y ERC y BComú presentarán ruegos sobre Casa Orsola
BARCELONA, 31 (EUROPA PRESS)
El Ayuntamiento de Barcelona celebra este viernes el primer pleno tras constatarse la falta de acuerdo entre el PSC y BComú para los Presupuestos, que provocó que el gobierno municipal mantuviese la prórroga de las cuentas para este 2025, y el cual coincidirá con el desalojo de la Casa Orsola previsto para las 8.30 horas.
“El gobierno se planta y da por cerrada la negociación de los presupuestos”, anunció el lunes pasado el teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, que reprochó a los Comuns su falta de voluntad para llegar a un acuerdo, el cual los socialistas sí consiguieron cerrar con ERC.
La líder de BComú, Janet Sanz, mostró sus sorpresa ante el movimiento y lamentó que el gobierno municipal renunciase de forma unilateral a la posibilidad de llegar a un acuerdo final: “Creemos que esto es lo que debe hacer un gobierno. Estar al lado de la gente. Y lo que nos encontramos es un gobierno que tira la toalla, que no es valiente, es más bien cobarde, y que es débil”.
Pese a no poder aplicar los Presupuestos previstos para este año, Valls aseguró que en la prórroga se seguían contemplando los acuerdos cerrados, algunos de ellos con BComú y otros con ERC, como el ‘hub del catalán’ que los republicanos llevarán al pleno, si bien se tendrán que realizar modificaciones de crédito, algunas de las cuales podrían requerir aprobaciones en el pleno.
La portavoz de Junts, Neus Munté, cargó este jueves contra Collboni por su incapacidad, textualmente, para alcanzar acuerdos frente a la situación de clara minoría en la que se encuentra su gobierno: “Encabeza un gobierno municipal débil, frívolo, sin rumbo ni liderazgo, y ahora sin presupuesto”, añadió.
DE LA ANTIGA MASSANA A CASA ORSOLA
Uno de los aspectos que marcarán el pleno del mes de enero es la vivienda, coincidiendo con el desalojo de la Antiga Massana el martes y el desahucio de la Casa Orsola previsto para este viernes, sobre el cual el gobierno municipal ya ha apoyado encontrar una solución entre los vecinos y la propiedad del edificio.
“No tiramos la toalla. Tenemos que ser rápidos”, ha urgido el Comisionado de Vivienda del Ayuntamiento, Joan Ramon Riera, que ha aceptado la propuesta de la Sindicatura de Barcelona, que este jueves ha instado al consistorio a dedicar los medios necesarios a encontrar una solución al respecto.
Tanto BComú como ERC han anunciado que llevarán le Casa Orsola al pleno: los primeros interpelarán al gobierno municipal para que muestre su solidaridad y pedirán intensificar la atención del consistorio con los afectados, mientras que los republicanos harán un ruego para que se establezcan los criterios para decidir qué inmuebles deben priorizarse en el tanteo y retracto.
“La lucha de la Casa Orsola no es sólo una lucha por un edificio, es una lucha por un modelo de ciudad”, sostuvo el concejal de ERC Jordi Coronas, mientras que al otro bando del pleno, el PP pedirá a Collboni seguir el ejemplo de la Antiga Massana y desalojar todos los inmuebles municipales ‘okupados’.
“Barcelona tiene que dejar de ser un paraíso de los violentos y un parque temático de la ‘okupación’ y la inseguridad”, defendió el líder popular, Daniel Sirera, y el de Vox, Gonzalo de Oro, propondrá un nuevo Plan de Vivienda para eliminar la reserva del 30% de vivienda protegida y ofrecer mayor seguridad jurídica a propietarios y promotores.
AGRESIÓN EN EL METRO
Otro de los temas en el que se incidirá en el plenario de este viernes es en la seguridad del Metro de Barcelona, después de que el sábado 18 de enero por la noche un vigilante de seguridad perdiese su ojo izquierdo tras la agresión de un joven de 19 años, hecho que ha llevó a la huelga a la plantilla de Securitas Seguridad España.
Tanto Junts como PP llevarán el caso al pleno: los de Carles Puigdemont presentarán un seguimiento de un ruego de febrero de 2024 con el que comprometieron al gobierno a reforzar, conjuntamente con la Generalitat, dispositivos conjuntos de Guardia Urbana, Mossos d’Esquadra y vigilantes de seguridad del propio Metro.
Mientras tanto, los populares presentarán un decálogo de medidas para garantizar la seguridad de los vigilantes: “No puede ser que a partir de las 8 de la mañana patrullen en solitario”, por lo que reclamarán que lo hagan en parejas, que haya un responsable de Mossos en el centro de control del Metro y que se mejoren de los protocolos ante situaciones de riesgo.
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