MADRID, 23 (SERVIMEDIA)
La Fundación Franz Weber censuró este jueves que el Senado acoja la concesión del Premio Nacional de Tauromaquia 2024 en colaboración con la Fundación Toro de Lidia y denunció que varias de las comunidades que apoyan este galardón han subvencionado a la entidad que lo promueve.
Lo hizo después de que trascendiera que el Senado, Andalucía, Cantabria, Región de Murcia, Comunidad Valenciana, Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura, Comunidad de Madrid, Castilla y León y la Fundación Toro de Lidia han convocado el Premio Nacional de Tauromaquia que fue suprimido por el Ministerio de Cultura.
La organización señaló que en esta iniciativa “aparecen mayoritariamente gobiernos de comunidades autónomas gobernadas por el PP, a excepción de Castilla-La Mancha, mientras que una mayoría de territorios ignora la misma”.
Esto le sirvió para dejar caer que “el pretendido galardón de carácter estatal no cuenta con el apoyo de Cataluña, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, Navarra, Euskadi, Galicia, los archipiélagos de Canarias y Baleares, La Rioja o el Principado de Asturias”.
Del mismo modo, destacó que “se da la circunstancia de que varias de las comunidades autocalificadas como ‘protaurinas’ han subvencionado a su vez a la fundación que presuntamente lidera la organización del premio taurino”, como lo atestigua que “sólo la Comunidad de Madrid destinará 1,7 millones de euros en 2025 a este ‘lobby’, mientras que Castilla y León regaló 295.000 euros para que organizaran novilladas con pésima asistencia”. A ello se añade que “Comunidad Valenciana, Extremadura o Castilla-La Mancha han mantenido encuentros regulares y ayudas directas para similares proyectos”.
Por todo ello, el coordinador de la campaña ‘Infancia Sin Violencia’, Rubén Pérez, lamentó que “el PP, usando su mayoría en escaños que no en soporte popular, desde el Senado pretende premiar a quienes hacen del maltrato animal una actividad laboral, incluso frente a las recomendaciones que vienen desde el Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas”.
También recordó que “mientras organismos internacionales advierten sobre el acceso y participación de niñas, niños y adolescentes en actos violentos con animales”, el Senado se ratifique en “reconocer esta misma crueldad con un galardón específico”.
Por último, consideró “curioso” que “se autodenomine un premio como ‘nacional’ cuando esa prerrogativa correspondería al Gobierno central” y haya “una decena de ejecutivos autonómicos que ignora, cuando no rechaza, la creación del mismo”, lo que “rompe la lógica de que es un galardón común a la ciudadanía”.
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