MADRID, 16 (SERVIMEDIA)
La actividad turística generó en España 208.000 millones de euros en 2024, lo que supuso un incremento del 6,5% con respecto al año anterior, según la Alianza por la Excelencia Turística (Exceltur).
Así lo destacó en una rueda de prensa el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, óscar Perelli, quien valoró que este crecimiento se traslada al empleo, los salarios y los resultados empresariales.
En cuanto a 2025, las previsiones de Exceltur siguen siendo positivas puesto que contemplan que la actividad del sector se eleve hasta los 224.000 millones, lo que supondría un incremento del 4%.
De esta manera, tanto en 2024 como en 2025, el sector turístico español lograría un incremento de su actividad que doblaría al de la media de la economía, llegando a representar el 13,5% del PIB.
De hecho, según señaló Pirelli, en 2024 el turismo aportó el 27,5% del crecimiento de la economía española gracias a la inversión del sector que se incrementó un 6,2%, frente al 2,3% de la media nacional.
Dicha inversión, según explicó, permitió el Reposicionamiento del producto, la generación de un mayor valor añadido, atraer un perfil de cliente que contribuye más por su mayor nivel de gasto y un crecimiento importante de la productividad.
También fue mejor la evolución del turismo en el empleo puesto que en 2024 generó 72.000 puestos de trabajo, experimentando un incremento del 3,2%, siete décimas más que el conjunto de la economía. Por su parte, las ventas de las empresas del sector mejoraron un 7,7% y sus resultados un 8,2%
A este respecto, Perelli destacó que también se produjo una mejora de la calidad del empleo con un crecimiento salarial del 3,2%, frente al 3,1% del resto de sectores, con una temporalidad del 7,8%, frente al 12,8% global. Además, de los nuevos contratos de 2024, el 96,7% fueron indefinidos, frente al 87,4% de la economía española.
Por mercados, el 80% del crecimiento turístico se debió a la demanda extranjera y especialmente a los viajeros de destinos de larga distancia con mayor gasto, cuyo gasto creció un 16%. Mientras, la demanda española se afianzó con un crecimiento de su gasto del 3,7%.
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