TERUEL, 15 (EUROPA PRESS)
Paleontólogos de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis han llevado a cabo una relevante investigación sobre paleobotánica, en la cual se ha estudiado una asociación de plantas del límite Cretácico Inferior-Cretácico Superior, de hace unos 100 millones de años, encontrada en el término municipal de Mosqueruela.
Estas plantas pertenecen al grupo de las gimnospermas, y consisten en ramas multidivididas de coníferas y en una hoja de morfología acintada de gran tamaño. Los restos de coníferas corresponden al género Frenelopsis, perteneciente a la familia Cheirolepidiaceae, un grupo de plantas que se extinguió a finales del Cretácico y que se caracterizaba por presentar hojas con morfología triangular, a modo de escamas, de tamaño milimétrico.
Por su parte, la gran hoja es del género Desmiophyllum relacionado con un grupo de gimnospermas, de afinidad indeterminada, que estaban ampliamente extendidas geográficamente durante el Mesozoico.
Los resultados de la investigación han sido pubicados en la revista científica ‘Palaeobiodiversity and Palaeoenvironments’. Según Luis Miguel Sender, primer autor de la publicación, “estos fósiles son muy singulares, ya que son restos articulados y de tamaño considerable correspondientes a plantas que vivían en tierra firme, pero que han sido encontrados en estratos correspondientes a depósitos marinos costeros. Este hecho indica que estas plantas vivirían muy próximas a la línea de costa en la zona del mar de Tethys, que se extendía por el área donde actualmente se encuentra el término de Mosqueruela hace unos 100 millones de años, y que fueron arrastradas por corrientes de baja energía, posiblemente a través del medio aéreo, y depositadas posteriormente en un fondo marino poco profundo”.
Esta investigación indica también que estas plantas están relacionadas con otras encontradas en diferentes zonas del planeta desde hace 125 a unos 100 millones de años.
Según Luis Mampel, paleontólogo de la Fundación Dinópolis y coautor del artículo, “esta nueva paleoflora puede compararse con las asociaciones vegetales de varias localidades situadas en las costas del mar de Tethys occidental hace unos 100 millones de años, así como con las encontradas en depósitos de hace unos 125 millones de años en la actual costa este de Brasil”.
Añade que la presencia de estos nuevos registros españoles abre nuevas hipótesis sobre la distribución y dispersión de las paleofloras costeras entre estas zonas paleogeográficas durante el límite Cretácico Inferior-Cretácico Superior”.
El director de la Fundación Dinópolis y coautor también de este estudio, Alberto Cobos, ha apuntado que “los registros fósiles de este tipo de plantas en los estratos de esta edad, en la zona de Mosqueruela, aportan datos muy importantes para conocer los ambientes en los que vivían los dinosaurios hace unos 100 millones de años, ya que en esta zona tenemos evidencias de su actividad gracias a las decenas de huellas de dinosaurios terópodos (carnívoros) que se sitúan en el yacimiento ‘Más de Pérez’, y que está musealizado y acondicionado para su visita”.
Esta contribución de la Fundación Dinópolis, adscrita al Departamento de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón, forma parte de las acciones del Grupo de Investigación FOCONTUR, ha sido financiada a través del Departamento de Empleo, Ciencia y Universidades y la Unidad de Paleontología de Teruel.
Ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Mosqueruela y sus habitantes, la Asociación de Desarrollo Gúdar-Javalambre y Maestrazgo (AGUJAMA) y del Parque Cultural del Maestrazgo-Geoparque Mundial de la UNESCO.
Todas las acciones relacionadas cuentan con el apoyo de la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, y el material estudiado se encuentra depositado en el Museo Aragonés de Paleontología en Teruel.
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