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La Luz Jubilar se apaga para clausurar el Año Jubilar 2024 de Caravaca de la Cruz

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MURCIA, 13 (EUROPA PRESS)

Las campanas de todas las iglesias de Caravaca de la Cruz sonaron este pasado domingo a las 9.00 horas para anunciar la clausura del Año Jubilar 2024. Esto supone un punto y seguido a doce meses en los que cientos de miles peregrinos han llegado hasta la Basílica para venerar la Sagrada Reliquia y ganar las indulgencias plenarias.

La Luz Jubilar, que ha permanecido encendida durante todo el año, se apagaba terminada la celebración que presidía el Nuncio de su Santidad en España, Bernardito Auza y el obispo de la diócesis de Cartagena, José Manuel Lorca Planes, según han informado desde la Real e Ilustre Cofradía de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca en una nota de prensa.

La misa, concelebrada por el arzobispo emérito de Burgos, Gil Hellín y el obispo de Jaén, Sebastián Chico, estuvo cantada por los coros de El Salvador y de la Catedral de Murcia.

Así, la celebración de la clausura del Año Jubilar 2024 congregó alrededor de las 11.00 horas a numerosas autoridades civiles y militares en la plaza del Arco.

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Desde allí, acompañados por la banda de música, partió la comitiva encabezada por el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, y de la que formaban parte, entre otros, el alcalde de la ciudad, José Francisco García; el hermano mayor de la Cofradía, Luis Melgarejo; la delegada del Gobierno, Mariola Guevara; la presidenta de la Asamblea Regional, Visitación Martínez; el consejero de Presidencia, Marcos Ortuño; la consejera de Cultura y Turismo, Carmen Conesa; la secretaria de Estado, María González Vera, junto a diputados nacionales y regionales.

Acompañados por la banda de música las autoridades fueron recibidas por el Nuncio y el obispo a las puertas de la Basílica minutos antes de que se iniciara la ceremonia.

En su homilía el obispo, que lleva como cruz pectoral a la patrona de Caravaca, recordó que el lema pastoral de este año es ‘Cristo en el centro’ y que la Vera Cruz “nos lleva directamente a él. El Lignum Crucis es para todos los caravaqueños y peregrinos el signo más excelente de la manifestación de Dios, porque el resplandor de la Cruz nos ha ayudado a descubrir y venerar al Crucificado”, apuntó.

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Durante la acción de gracias el hermano mayor de la Cofradía se dirigió a la Vera Cruz, para agradecerle el haber permitido la llegada de miles de peregrinos “cuyos profundos testimonios de fe han reforzado más si cabe la nuestra”.

Tras la adoración de la Santísima Cruz, al abandonar el templo, los asistentes recibieron de manos de los voluntarios un llavero conmemorativo con la forma de una pequeña alpargata, símbolo de los caminos recorridos por los peregrinos desde hace más de ocho siglos, con destino a la Basílica de la Vera Cruz.

EL AÑO JUBILAR DE LOS PEREGRINOS Y LOS CAMINOS

El Año Jubilar que se clausura ha sido, en palabras del hermano mayor de la Cofradía, el que constata un cambio de tendencia en el perfil del visitante. “Cada vez hay más peregrinos que recorren los distintos caminos hasta Caravaca, tras la puesta en valor de los mismos”, explicó. Un reflejo de ese cambio de tendencia son las más de 10.000 Caravacensis expedidas.

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El Año Jubilar 2024 deja atrás 950 celebraciones religiosas, 80 de ellas se han celebrado en el exterior de la Basílica, cuando el número de participantes superaba los 500 y las condiciones meteorológicas lo han permitido. De todos los grupos de peregrinos que llegaron a Caravaca durante este año, 190 lo hicieron desde fuera de España.

Además, 2.000 sacerdotes han participado en las celebraciones y se han movilizado más de 150 voluntarios, que organizados en turnos rotatorios han atendido y guiado diariamente, sin excepción, a los distintos grupos desde la estación jubilar en la parroquia de El Salvador hasta la Basílica.


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