MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
El 40% de propietarios que alquilan su vivienda se ha planteado pasarse al alquiler de temporada y el 36% ve probable retirar su vivienda del mercado del alquiler, según un estudio publicado este viernes por el servicio de estudios del portal inmobiliario Fotocasa.
Según explicó Fotocasa en una nota de prensa, el número de propietarios que optarían por un alquiler de temporada ha ascendido nueve puntos porcentuales respecto a una encuesta similar realizada a principios de 2024. El porcentaje de aquellos que se plantean sacar su vivienda del mercado del alquiler se ha elevado diez puntos porcentuales.
Asimismo, el 47% de los propietarios que conocen la Ley de Vivienda tiene previsto invertir menos en mejoras dentro de su vivienda. Para la responsable de Estudios de Fotocasa, María Matos, el balance tras un año y medio de la aplicación de la Ley de Vivienda es negativo.
“La falta de un diagnóstico acertado y de consenso con los propietarios, una de las piezas clave del mercado de la oferta, ha generado inquietud y descontento. Las medidas implementadas en la ley han aumentado la inseguridad jurídica, desmotivando a muchos propietarios a mantener sus viviendas en el mercado de alquiler residencial tradicional”, indicó Matos, quien señaló que esto ha provocado un “evidente desplazamiento” hacia otras modalidades de arrendamiento, como el alquiler temporal, que ha crecido un 55%, y el turístico, que ha aumentado un 40%.
LOS INQUILINOS, PESIMISTAS
Asimismo, el estudio de Fotocasa indicó que los compradores que creen que la ley complica sus propósitos suben desde el 33% en 2024 hasta el 46% actual, un incremento de trece puntos porcentuales.
También los vendedores perciben que la regulación obstaculiza sus planes. Un sentimiento, además, que se ha agudizado en los últimos meses, experimentando una subida de diez puntos porcentuales, ya que pasa del 32% de 2024 al 42%.
Respecto a los demandantes de arrendamiento, estos se muestran significativamente más pesimistas que a principios de 2024, ya que los que opinan que la regulación dificulta sus planes suben del 36% al 42%. Por su parte, los que creen que esta iniciativa mejora sus expectativas caen desde el 24% al 19% actual.
Por último, los que ahora mismo arriendan una vivienda también son pesimistas. Mientras que aprincipios de 2024 eran el 52% los que creían que la ley les ponía su objetivo más difícil, ahora este porcentaje se amplía al 60%. Por el contrario, los que piensan que el nuevo escenario les ayuda baja dos puntos porcentuales (del 16% al 14%).
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