PALMA, 15 (EUROPA PRESS)
La Dirección General de Emergencias e Interior ha preparado dos simulacros de contaminación marina en cala Figuera y un amerizaje en Ibiza para poner en práctica sus protocolos de actuación y prevenir a sus efectivos ante estos posibles incidentes.
El primer ejercicio se ha desarrollado en el puerto de cala Figuera –Santanyí– y se ha centrado en la lucha contra la contaminación del mar y en la activación de los planes de autoprotección de los puertos, según ha explicado la Conselleria de Presidencia y Administraciones Públicas en una nota de prensa.
En esta simulación, se ha contado con la participación del personal de la Dirección General, miembros de Puertos de Baleares y la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Santanyí, que han colaborado para ensayar la colocación y retirada de barreras de protección, con especial atención a la seguridad de los intervinientes y al respeto por el medioambiente, además de fomentar la colaboración con otros organismos.
El segundo ejercicio se ha llevado a cabo en el aeropuerto de Ibiza y ha consistido en una simulación sobre plano del amerizaje de una aeronave en una zona de difícil acceso.
Este ejercicio, que ha contado con la presencia del director general de Emergencias e Interior, Pablo Gárriz, ha tenido como finalidad poner a prueba los protocolos establecidos para la gestión de crisis en un entorno aeroportuario.
Otra de las intenciones ha sido practicar la coordinación para evaluar la capacidad de colaboración entre diferentes organismos y servicios de emergencia, así como analizar la eficacia de las respuestas para mejorar los procedimientos ante posibles incidentes de este tipo.
En la práctica, además del personal de Emergencias y del 112, también han intervenido medios del aeropuerto, Delegación del Gobierno en Baleares, Bomberos, Salvamento Marítimo y el SAR.
“Ambos ejercicios forman parte del compromiso continuado de la Dirección General de Emergencias e Interior de garantizar una respuesta rápida, coordinada y eficaz en situaciones de emergencia, tanto en ámbitos marítimos como en infraestructuras críticas como los aeropuertos”, han alegado desde la Conselleria.
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