MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
La Asociación Empresarial Cárnica (Anafric) mostró este jueves su preocupación por la reciente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que permite a los productos vegetales usar denominaciones como ‘bistec’, ‘salchichas’ o ‘hamburguesas’.
“Esta decisión nos sitúa en un escenario que, lejos de favorecer la transparencia, puede generar una mayor confusión entre los consumidores”, señaló Anafric, quien aprovechó para pedir a la Unión Europea una legislación específica que proteja las denominaciones cárnicas, garantizando que estos términos sean utilizados exclusivamente para productos de origen animal.
Para la asociación empresarial esta medida no solo es “vital” para proteger a un sector con “profundas raíces en la economía europea”, sino también es necesario para salvaguardar la salud de los consumidores, que podrían verse engañados por etiquetas “confusas”.
Asimismo, Anafric recordó que las denominaciones de los productos tienen una carga informativa clave ya que están asociadas a aspectos como tradición, calidad y un proceso específico de producción. “La utilización indiscriminada de términos cárnicos en productos vegetales puede hacer que el consumidor asuma erróneamente que está obteniendo los mismos beneficios nutricionales que en los productos de origen animal, cuando no es así. En este sentido, nos preocupa que esta confusión afecte no solo las decisiones de compra, sino también las dietas y la salud de los consumidores”, explicó la asociación.
“Pedimos a la Unión Europea que implemente normas justas y precisas para evitar que el marketing detrás de las alternativas vegetales empañe los verdaderos beneficios que estas pudieran tener, bajo un prisma de claridad y veracidad”, exigió Anafric, quien aseguró que los intereses comerciales de quienes promueven estos productos deben estar regulados por una legislación “que no solo proteja la salud, sino que respete a los consumidores”.
Por último, Anafric anunció que a pesar de la sentencia seguirá defendiendo unas reglas del juego claras, que no vuelvan loco al consumidor y que eviten una distorsión innecesaria en el innecesaria en el mercado. “La tradición cárnica merece respeto y el consumidor, transparencia”, indicó Anafric.
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