En la novela prima el diálogo y se aprecia el juego del engaño entre los personajes
BARCELONA, 4 (EUROPA PRESS)
El escritor Gonzalo Torné ha retratado las nuevas formas de relaciones amorosas y la melancolía de las “vidas no vividas” en su nueva novela ‘Brujería’ (Anagrama), en la que ahonda en cómo las personas se ven reflejadas en la vida de los demás y todo aquello que pudieron vivir y no llegaron a hacerlo.
En una entrevista este viernes a Europa Press en Barcelona, el autor ha explicado que la novela quiere plasmar “una época en la que cada uno se puede organizar sentimental y emocionalmente como quiera”, así como que hay trampas, dice textualmente, en cada una de esas relaciones.
La historia se centra en Diego Duocastella, un hombre que, después de pasar siete años en Italia, vuelve a Barcelona “liberado o condenado por no tener cargas familiares” y en Catalunya se une a un matrimonio, los Pons, y a otra mujer, Berta, y entre los cuatro surgirá una relación cruzada de amor, amistad, ambición y deseos.
Al mismo tiempo, Torné señala que el protagonista siente nostalgia o melancolía por un grupo de amigos que ha desaparecido de su vida: “Es sentir nostalgia amable por vidas que podríamos vivir y no hemos podido porque se no se puede vivir todo”.
“LA NOVELA MÁS REALISTA” DE TORNÉ
Torné ha señalado que la novela está protagonizada por los diálogos de los personajes que muestran cómo son dos personas cuando se conocen: “La idea es que no sea el típico diálogo ni seco ni cortante, sino para tantearse dos personas. Cuando las relaciones están en el aire y no sabes si serán socios, amantes” u otra cosa.
Su intención era romper con la idea de que en la novela o en el teatro los personajes tienen muy claro lo que hacen y lo transmiten de una forma clara, ya que en ‘Brujería’ “el lector debe sentarse tranquilamente y el juego es ver cuándo los personajes se están engañando, contradiciendo o qué quieren hacer unos con los otros”.
“Es la novela más realista en ese sentido que he escrito. Las conversaciones de la gente, de mis amigos, se parecen mucho más a ese tanteo. Es como cuando estamos hablando e intentamos presentarnos de alguna manera o dar una información u ocultarla. Es más verosímil”, añade.
En la historia Torné también ha querido añadir el contraste económico entre los diferentes personajes ya que cree que no se puede hablar de familias ni de relaciones amorosas sin tratar “lo que supone el dinero”.
LA MELANCOLÍA
Ha destacado el papel que juega la melancolía en la novela y, concretamente, ha hecho referencia a los diarios de Juan Marsé y cómo en ellos se dirige a un interlocutor ausente: Torné cree que es lo que hace el protagonista quien “cuenta a sus amigos” lo que está viviendo, aunque no los ve desde hace tiempo.
“Es una melancolía o nostalgia en cuanto a que no podemos vivir todas las vidas. Imaginarnos cómo hubiéramos podido ser con otros amigos o con otro trabajo. Hay gente cuyos interlocutores son ausentes. Una de las dudas del libro es qué ha pasado con esos amigos. Hay una melancolía de las posibilidades”, ha apuntado.
Preguntado por si ha habido inspiración de ‘Las amistades peligrosas’, de Choderlos de Laclos, el autor ha dicho que ha sido una inspiración general, ya que esa obra “expone con mucha crudeza una serie de relaciones aparentemente antisociales pero inocentes” y dice que le gustaría que su novela se pudiera emparejar con ella.
Sobre futuros proyectos, Torné ha avanzado que le gustaría escribir una novela del personaje Bodel –quien aparece en esta novela– sobre la santidad y la “idea de que para ejercer la bondad hay que ser firme”, y también se ha planteado novelas cortas sobre hechizos.
- Te recomendamos -
