ALMERÍA, 3 (EUROPA PRESS)
La autora Fernanda Terpolilli Fassio ha publicado ‘El vuelo de Luisina’; un cuento infantil que lleva un “mensaje claro para los padres” a los que invita a “revisar sus propias mochilas” toda vez que insta a los pequeños “a volar livianos por la maravillosa vida que tienen por delante”
“Apenas emigramos a España escribí ‘El vuelo de Luisina’. Lo hice en una noche. Lo escribí a mano en un cuaderno que le había regalado a mi abuela Elena para que escribiera sus memorias. Al morir ella, me mandaron el cuaderno. Lo abrí con mucha ilusión, esperaba encontrar allí su letra, su historia. Sin embargo, las hojas estaban en blanco y sentí que su mensaje era “escribí vos””, ha explicado la autora en una nota de la editorial Círculo Rojo.
Según el sello de autoedición, “Luisina es una niña que emigra a España junto a sus padres” de manera que todos “van a empezar de nuevo en otra tierra, la misma de la que salieron sus ancestros hace varias décadas y, para avanzar en orden, hay que dejar atrás todo aquello que no le pertenece y ordenarse”.
“En sistémica se habla de ‘Amor ciego’ –término creado por Bert Hellinghuer, el padre de las Constelaciones– para describir todo lo que los hijos son capaces de hacer para “cuidar” a sus padres entrando en un espiral de desorden que puede llevarlos a situaciones de repetición y dolor. El mensaje del cuento es claro”, ha considerado la autora.
La firma editorial apunta que “el lector va a encontrar, según las palabras de la autora, una historia simple y profunda a la vez, una historia tan actual como ancestral, un viaje hacia afuera y hacia adentro”.
El cuento narra la historia de Luisina, quien “inicia un viaje hacia afuera cuando sube al avión que la lleva a España y, al mismo tiempo, inicia un viaje al interior de su alma cuando despliega sus alas”. Sin embargo, “nota que la mochila que lleva en su espalda pesa demasiado”.
“¿Cuántas veces nuestros hijos cargan mochilas pesadas con situaciones y cosas que no les pertenecen? ‘El vuelo de Luisina’ es una invitación a “revisar nuestro equipaje como madres y padres y a hacer que el vuelo de nuestros hijos sea ligero y liviano”, expone la autora.
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