ARNEDO (La RIOJA), 2 (EUROPA PRESS)
El novillero madrileño, Alejandro Chicharro, ha sido cogido en la pierna en su segundo en la última novillada de la cuadragésima novena edición del ‘Zapato de Oro’ de Arnedo. Juan Herrero, silencio en los dos, y Bruno Aloi ha sido ovacionado en su último. Se han lidiado ejemplares de Adolfo Martín, todos cárdenos, de desigual presentación y complicados.
El ‘Arnedo Arena’ ha registrado menos de un cuarto de entrada. Como ocurriera en los días anteriores, al finalizar el paseíllo, un sector del público ha mostrado, pitando, su disconformidad por la eliminación de un festejo.
Ha abierto la tarde ‘Chaparrito’, de salida abanto, y con el que Juan Herrero no ha podido lucir con el capote, ya que el animal ha perdido las manos en varias ocasiones.
Ha brindado al público para iniciar la faena con buenos doblones. Tras probarlo con el pitón izquierdo, y en vista de que era el peor de los dos, ha vuelto con la mano derecha para realizar una faena que ha adolecido de emoción. Pinchazo y estocada trasera, necesitando descabello, siendo silenciada su actuación.
El de Los Molinos se ha topado, en su segundo, el cuarto de la tarde, con ‘Mario’, un complicado utrero con el que ha optado por abreviar. Ha fallado con los aceros y como con su primero silencio. El animal ha sido pitado en el arrastre.
COGIDA DE CHICHARRO
Al también madrileño Alejandro Chicharro, le ha correspondido en suerte, en su primero, ‘Lagartijo’, que ha blandeando de inicio. Ha brindado al público, logrando alguna serie destacada por el pitón derecho, ante un novillo más complicado por el izquierdo. Estocada, descabello y silencio para el espada.
El de Miraflores de la Sierra se ha topado en su segunda actuación, la quinta de la tarde, con ‘Manchonero’, al que ha lanceado con gusto a la verónica.
En banderillas se ha desmonterado Jesús Robledo ‘Tito’. Ha brindado al torero local Diego Urdiales, para iniciar la faena de muleta. Al inicio de la misma ha sido prendido Chicharro en la pierna izquierda, pasando a la Enfermería. Un utrero de nombre ‘Bordador’ ha sido el primero de Bruno Aloia, que el espada ha brindado al torero retirado Tomás Campuzano.
Con la muleta, el mexicano ha realizado una faena, larga, de interés por ambos pitones, llevándose un susto, sin consecuencias. Estocada desprendida y descabello. Silencio del respetable.
Con el que ha cerrado plaza, y también la feria del ‘Zapato de Oro’, de nombre ‘Horquillón’ el de Ciudad de México lo ha lidiado caminando hacia atrás. Posteriormente, ha dejado su montera en la puerta de la Enfermería brindado la muerte del astado a Chicharro.
Ya, con la muleta, firme con la mano izquierda, con algunos buenos naturales, ante un novillo, mirón, que ha ido a menos, poniendo aún así en dificultades al espada Estocada defectuosa y descabello. Ovación para el mexicano.
PARTE MÉDICO DE ALEJANDRO CHICHARRO
El parte médico ofrecido a lo largo de la tarde por el servicio de Enfermería del ‘Arnedo Arena’ informa que el novillero presenta herida por asta de toro en cara interna del muslo derecho con dos trayectorias, una ascendente hacia el glúteo de unos 15 cms y otra interna de unos 6 centímetros.
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