PAMPLONA, 1 (EUROPA PRESS)
El consejero de Educación del Gobierno de Navarra, Carlos Gimeno, y Teresa Imízcoz, directora de UNED Pamplona y directora de la Cátedra de Inteligencia Emocional UNED Pamplona – Fundación Caja Navarra, han firmado este martes un convenio de colaboración para fomentar la educación emocional en el profesorado y alumnado de Navarra.
En el acto han participado también Juan Carlos Pérez González, director científico de la Cátedra de Inteligencia Emocional UNED Pamplona – Fundación Caja Navarra, y Gil Sevillano, director general de Educación del Gobierno de Navarra.
Las dos instituciones firmantes, según han indicado desde la UNED en una nota de prensa, “consideran relevante contribuir a la mejora de la sociedad navarra a través de una formación y educación de calidad en el ámbito de la inteligencia emocional”.
Teresa Imízcoz ha explicado que el interés por la creación de una Cátedra de Inteligencia Emocional en el Centro Asociado de la UNED en Pamplona “parte de las necesidades sociales detectadas, así como del importante impacto que en muchas áreas de la población navarra pueda tener la formación, investigación y transferencia del conocimiento”.
“Fruto de este interés social, se constituyó la Cátedra de inteligencia emocional UNED Pamplona- Fundación Caja Navarra en febrero de 2024. Desde entonces, han participado más de 2.400 personas en nuestros cursos de formación y conferencias sobre inteligencia emocional”, ha señalado.
Según ha apuntado, en los sistemas educativos actuales, desde Educación Infantil hasta Bachillerato y Formación Profesional, fundamentalmente “se forma al alumnado en el ámbito de la inteligencia cognitiva o intelectual, mediante la adquisición de conocimientos”. Sin embargo, “no se les forma o se les forma escasamente en inteligencia emocional”.
Por su parte, Gimeno ha expresado que “venimos de un vuelco inesperado en la escolarización, de pasar por una pandemia, por una escolarización truncada en dos cursos académicos y esto ha provocado una brecha emocional en el alumnado”.
“La recuperación del bienestar emocional junto a la recuperación del nivel de aprendizaje que se pudo perder son dos cuestiones en las que hay que trabajar”, ha apuntado, tras añadir que “los niveles de ansiedad, depresión y de ideas suicidas entre los escolares se van incrementando y eso exige una intervención y actuación que esté perfectamente planificada”.
A su juicio, “hay que rentabilizar y optimizar todos los recursos para que el profesorado y alumnado navarro mejoren en este aspecto y la calidad del sistema educativo navarro siga avanzando”. “Este convenio va a revertir de una forma significativa y relevante en el sistema educativo navarro”, ha añadido el consejero.
LÍNEAS DE TRABAJO DEL CONVENIO
Con este convenio se pretende “impactar positivamente” en la educación navarra de los niveles de educación Primaria, Secundaria, Formación Profesional y Bachillerato.
Para lograrlo, están previstas cuatro líneas de trabajo conjunto con el Departamento de Educación: dotar de formación al profesorado, diagnosticar las necesidades de formación emocional del profesorado, diagnosticar las necesidades de formación emocional del alumnado, y ofrecer cursos de formación en inteligencia emocional para el conjunto del profesorado.
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