ZARAGOZA, 26 (EUROPA PRESS)
La “cultura preventiva” de la seguridad laboral para evitar los accidentes en el trabajo no llega como debiera a las subcontratas y las pequeñas empresas, según apuntan los datos del Instituto Aragonés de Seguridad y Salud Laboral (ISSLA) y han constatado este jueves el director general de Trabajo, Jesús Divassón, y el fiscal de Sala coordinador de Seguridad y Salud en el Trabajo, Ángel Javier Muñoz Marín, quien ha reiterado la propuesta para crear juzgados especializados en accidentes laborales.
En un momento marcado por el repunte de la siniestralidad laboral en Aragón, donde ya se contabilizan 24 fallecidos en el presente año, ambos han participado junto a un buen número de expertos en la jornada ‘Accidentes de Trabajo y la interconexión de órdenes jurídicos y consecuencias para la empresa’ celebrada en el Colegio de Abogados de Zaragoza.
Para Divassón los puntos débiles están en “la coordinación de actividades empresariales y la subcontratación, donde se producen los accidentes más graves, incluso mortales, en aquellos sectores de mayor riesgo como la construcción, la industria, y la agricultura, porque en el ámbito rural se nos hace más difícil llegar y difundir esa cultura preventiva”, ha enumerado.
Por su parte, el fiscal de Sala coordinador de Seguridad y Salud en el Trabajo, Ángel Javier Muñoz Marín, considera que “falta cultura preventiva” en las pequeñas empresas, en las que habría que “darle una vuelta” a los servicios de prevención porque “prácticamente todos los accidentes son evitables”.
El acto ha puesto el acento en la necesidad de seguir trabajando en mejorar la prevención para tratar de frenar el goteo continuo de accidentes, el último este pasado lunes 23 en Épila, en el que un trabajador resultó herido grave tras caer de un techo en una empresa en la que ya murió un empleado en 2021 en otro accidente laboral.
“Desde 2006 a 2013 hubo una bajada muy importante de accidentes mortales. Fue sistemático. En el 2013, un año subimos, pero es que es verdad, se lo digo así, un año subimos, otro bajamos, uno subimos, otro bajamos”, ha explicado Muñoz.
Así, según ha detallado, en 2023 se redujo la cifra de accidentes en un centenar respecto al año anterior, “que había sido durísimo”, ha recordado. “Pero este año estamos volvieron a subir y en junio había 20 fallecidos más, con lo que a final de año podemos estar en 40 o 50”, ha proyectado.
Dentro de esa “aleatoriedad” aparentemente inmanejable, Muñoz ha asegurado que “un accidente que se repite es un accidente que se puede prevenir siempre, siempre”.
Por sectores, el fiscal de Sala ha explicado que servicios es el que más siniestros acumula “por mayor volumen de puestos de trabajo”, la construcción el de mayor incidencia, “por ser el de mayor riesgo”, industria y agricultura, “que es el que menos tiene, pero la mayor parte son mortales porque suelen ser vuelcos de tractores”, ha enumerado.
LA PEQUEÑA EMPRESA
El fiscal de Sala ha apuntado a “esas empresas más pequeñas, de dos o tres trabajadores, en las que hay un empresario que está haciendo exactamente lo mismo y asumiendo el mismo riesgo que sus trabajadores”. “¿Está capacitado ese empresario para dedicarse a la prevención de su empresa? A lo mejor no”, ha reflexionado.
Por ello, ha planteado “darle una vuelta” a los servicios de prevención “a ver cómo funcionan” porque “se pueden hacer muchísimas cosas e insisto, puedo asegurar que prácticamente todos los accidentes son evitables”.
Esa revisión se enmarca en el dilatado proceso de reforma de la Ley de Prevención: “La ley es muy buena, pero a lo mejor no abarca todo o no está dirigida precisamente a las pequeñas empresas”, ha planteado Muñoz, quien ha asegurado que la mesa de diálogo social viene trabajando en su actualización. “Modificar bien una ley es que lleva su tiempo”, ha advertido.
El repunte de accidentes y fallecidos se produce precisamente en pleno “plan de choque” impulsado por el Ejecutivo aragonés, que ha supuesto el aumento de efectivos hasta los 87 inspectores desde los 78 que había al comienzo de la legislatura. Una mejora de Divassón ha atribuido “al impulso y compromiso” de la vicepresidenta del Gobierno de Aragón, que como ha recordado, envió una carta al Ministerio para reclamar más medios “como también ha hecho el Gobierno de Aragón y el ISSLA”.
Una falta de mejoría ante la que Divassón defiende que el Ejecutivo seguirá insistiendo con “la constancia, la permanencia, el liderazgo y la colaboración”. Al respecto ha aludido a una jornada de responsabilidad de los técnicos y a otra sobre seguridad vial laboral programada la semana que viene en el Mobility.
PREVENCIÓN EN LA ESCUELA Y CREACIÓN DE JUZGADOS ESPECIALIZADOS
El fiscal de sala ha llamado a llevar la prevención más allá del mercado de trabajo: “Niños y niñas en el colegio que aprendan que el día de mañana van a ser trabajadores, trabajadoras, empresarios y empresarias y que igual que todo el mundo sabe que hay que ponerse el cinturón de seguridad cuando entras en un coche, que aprendan que cuando vayan a trabajar o tengan su empresa, hay que cuidar mucho la prevención de riesgos laborales”, ha abogado.
Junto a esas mejoras y reformas, Muñoz ha vuelto a reclamar al Consejo del Poder Judicial la creación de juzgados especializados de accidentes laborales. “Habitualmente estamos en cinco años, cinco años y medio desde que ocurre el accidente hasta la primera sentencia, aunque este año un 32% de los procedimientos se han dilucidado en tres años. Pero es verdad que hay otros que son larguísimos”.
Un problema que ha achacado a lo “complicadas” que resultan las investigaciones y el “atasco” de la Justicia. “En los juzgados de lo penal, que están saturados, te señalan el juicio para un año o año y medio y con eso ya te pones en cuatro años y medio. Llegas y el juicio se suspende por algún motivo. Otro año”, ha compartido.
Esa demora, ha remarcado, agranda el drama de las víctimas y sus familias: “Una víctima está durante cinco o seis años reviviendo constantemente el accidente de su padre, de su madre, de su hermano, de su hijo, de su hija. Eso es muy duro”, ha reflexionado.
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