Propone bonificar viviendas que se pongan en alquiler y diferenciar el IBI de zona urbana y rural
GIJÓN, 24 (EUROPA PRESS)
El portavoz de IU – Más País – IAS en el Ayuntamiento de Gijón, Javier Suárez Llana, ha presentado las diez enmiendas que plantean al proyecto de Ordenanzas Fiscales para 2025 y que incluyen medidas como recargo a viviendas vacías, IBI diferenciado o incrementar la tasa de licencia ambiental para las Viviendas de Uso Turístico.
Suárez Llana, en rueda de prensa en el Consistorio gijonés, ha lamentado que haya una “ausencia” de debate fiscal por parte del Gobierno local y ha abogado por la progresividad para un pago más justo. A su juicio, hace falta un estudio “serio y riguroso” de las Ordenanzas Fiscales.
En el caso de las enmiendas relacionadas con el IBI, IU apuesta por diferenciar IBI rústico del IBI urbano, como se hace, según él, en la mayor parte de ciudades.
El portavoz de IU ha recalcado que no es un capricho, ya que llevar servicios públicos a zona rural “cuesta más dinero”, ha recalcado. Algo que IU cree que debe repercutir, por eso plantean gravar más el IBI rústico que el urbano.
De manera simbólica, proponen aplicar un tipo impositivo del 0,46 en IBI urbano y del 0,47 en el rústico, en lugar del 0,45 para ambos. Ha insistido, en este caso, que es simbólico porque lo que quieren es que se abra el debate sobre la diferenciación entre ambos.
Referente al IBI diferenciado, que quedó en suspenso por la pandemia de la COVID-19 y era con un tipo del 0,73 para valores de más de un millón de euros, IU propone que se aplique y sea de un uno por ciento, para el mismo valor catastral.
Plantean, además, implementar un recargo a las viviendas vacías. En concreto, propone que sea del 50 por ciento para viviendas desocupadas por más de dos años y del 100 por ciento para las que lleven tres años o más. En el caso de que sean dos o más inmuebles de un mismo propietario, IU establece recargos del 100 por ciento para las que lleven más de dos años desocupadas y del 150 por ciento para las de más de tres años.
En este punto, ha remarcado que hay que hacer una definición de viviendas desocupadas. IU propone que no haya habitantes empadronados, que no tenga dada de alta agua o luz, o sobre esta última, que el consumo eléctrico registrado sea inferior a 122 kw/hora. Suárez Llana ha apuntado que el último estudio realizado habla de 7.000 viviendas vacías en Gijón; 8.000 según el INE.
Proponen, por otro lado, una bonificación para propietarios que pongan su vivienda en alquiler con renta limitada. Sería del 50 por ciento de la cuota integral del IBI, pero si son inmuebles con dos o más titulares se rebajaría al 25 por ciento.
Con referencia a las bonificaciones del IBI en caso de familias numerosas, IU quieren bajar el valor catastral, para que no exceda de los 150.000 euros.
Otra de las enmiendas va referida a la tasa que regula la tramitación de licencias ambientales. Se hacía diferenciación del precio con función al tipo de actividad hasta ahora, pero el Gobierno local propone que sea con función a la superficie útil, de forma que menos de 240 metros cuadrados paga una tasa de 37,70 euros, y si es superior, de 250 euros.
Suárez Llana ha recalcado que aquí se engloban las Viviendas de Uso Turístico (VUT), a lo que ha incidido en que pocas van a tener más de 240 metros cuadrados. Para él, deben pagar más porque son una actividad económica. Por ello, se pide excepcionar estas y que tengan una tarifa específica de 500 euros.
Por último, sobre la nueva tarjeta para aparcamientos disuasorios, proponen una enmienda de adicción para que incluya dos viajes gratuitos en bus municipal o dos usos de servicio Gijón Bici.
En cuanto a las empresas municipales, en la EMA proponen una subida conforme al IPC como referencia, que fue del 2,3 por ciento en agosto, en vez de la congelación que dice el Gobierno local. Tampoco sería de forma lineal, sino con función a metros cúbicos, divididos estos en tres categorías.
Respecto a Emulsa, IU está de acuerdo con la necesidad de aumentar recursos vía impositiva, pero les parece que una subida lineal del 25 por ciento es “poco equitativa”.
Por este motivo, para la cuota doméstica se pide aumentar un 10 por ciento, mientras que a usos industriales un 30 por ciento y a grandes productores del 35 por ciento.
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