VILLEPINTE (FRANCIA), 06 (SERVIMEDIA)
La selección masculina de voleibol sentado de Irán consiguió este viernes en París su octava medalla de oro en Juegos Paralímpicos gracias en parte a la actuación de su principal estrella, Morteza Mehrzad, que es el deportista más alto en la cita paralímpica parisina y el segundo hombre con mayor altura del mundo (2,46 metros).
El voleibol sentado, reservado para personas con discapacidad física en miembros inferiores, debutó como deporte paralímpico en Arnhem (Países Bajos) en 1980 después de hacerse popular a mediados del siglo XX.
Irán es el equipo masculino dominante en Juegos Paralímpicos, puesto que, hasta París 2024, contaba con siete oros (Seúl 1988, Barcelona 1992, Atlanta 1996, Sidney 2000, Pekín 2008, Río 2016 y Tokio 2020) y dos platas (Atenas 2004 y Londres 2012).
La otra potencia es Bosnia-Herzegovina, que se adjudicó los oros de Atenas 2004 y Londres 2012, las platas de Sidney 2000, Pekín 2008 y Río 2016, y el bronce de Tokio 2020.
Pues bien, ambos equipos se enfrentaron este viernes en la final en el París Norte Arena, situado en la localidad de Villepinte, a unos 23 kilómetros al norte de la Villa Paralímpica de París.
GRADAS ABARROTADAS
Con las gradas abarrotadas y un ambiente animado con música y mucha efusividad entre el público, el partido comenzó con el primer set a favor de los bosnios (25-22).
Sin embargo, el conjunto iraní tomó las riendas del encuentro a partir del segundo parcial, merced a las acciones de Mehrzad, cuya envergadura dio muchos puntos a su selección, sobre todo cerca de la red.
Así, Irán consumó su remontada al adjudicarse los tres sets siguientes por 28-30, 16-25 y 14-25. Mehrzad, que tuvo que dormir en el suelo de su habitación en la Villa Paralímpica porque no había una cama adaptada a su gran tamaño, fue el jugador más determinante con 27 puntos.
Mehrzad tiene acromegalia, una enfermedad rara derivada de un exceso de la hormona del crecimiento. Su pierna derecha es unos 15 centímetros más corta que la izquierda. Utiliza silla de ruedas o muletas tras una grave fractura de pelvis sufrida en un accidente de bicicleta durante la adolescencia.
En 2011 empezó a jugar al voleibol sentado después de que un entrenador lo viera en televisión y considerara su altura como una ventaja potencial. Entró en el equipo nacional de voleibol sentado de Irán cinco años después.
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