MADRID, 06 (SERVIMEDIA)
El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, considera que “garantizar” una vivienda “digna” es el “reto más apremiante” de esta legislatura y expresó su intención de llevar “ya” al Congreso de los Diputados la Ley de Servicios de Atención a la Clientela, al tiempo que reivindicó que el etiquetado braille de productos, actualmente en periodo de audiencia pública, derribará una “barrera estructural para cientos de miles de compatriotas”.
Así lo aseveró en un hilo publicado en sus redes sociales coincidiendo con el inicio del nuevo curso político y en el que quiso compartir algunos de los “avances” en materia de consumo impulsados por su gabinete durante el primer año de la presente legislatura, así como sus “objetivos” en este ámbito para los próximos meses.
Tras puntualizar que el “principio general” de la actuación de su departamento es “democratizar las relaciones económicas defendiendo los derechos de las personas consumidoras”, Bustinduy afirmó que el “reto más apremiante de esta legislatura es garantizar una vivienda digna”.
“En el marco de nuestras competencias, hemos emprendido acciones relativas a la publicidad de pisos turísticos ilegales y al cobro de comisiones ilegales a inquilinos por parte de grandes inmobiliarias”, abundó.
En paralelo, subrayó que el ministerio que dirige ha “retomado” la tramitación de la Ley de Servicios de Atención a la Clientela, que decayó por la convocatoria de elecciones antes de su aprobación definitiva en las Cortes.
“Las personas deberán ser atendidas en tres minutos y sus reclamaciones, resueltas en 15 días”, advirtió en relación al texto de una norma que, insistió, el ministerio quiere “llevar al Congreso ya”, convencido de que “nadie debería obstaculizar algo tan esencial como proteger el tiempo de la gente”.
REBAJA DEL IVA AL PRECIO DEL ACEITE
A su vez, resaltó que, tras las denuncias de Facua, Consumo envió requerimientos a los “principales” supermercados para “asegurar que se trasladara la rebaja del IVA al precio del aceite de oliva”, al tiempo que elevó la información recibida a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Junto a ello, detalló que una de las primeras sanciones firmes del ministerio que dirige estaban relacionadas con las “falsas rebajas”, prácticas ilegales que, sentenció, “suponen un engaño a las personas consumidoras”.
En este sentido, destacó que su gabinete supervisa “más de 1.000 productos diariamente” y sanciona “a quienes no cumplen con la ley”.
“Los derechos de las personas consumidoras deben respetarse”, puntualizó, al tiempo que confirmó que ese es “el principio que guía” las actuaciones en curso de su cartera en materia de vivienda, comercio y alimentación, pero también en el transporte aéreo, la venta de entradas o la publicidad encubierta en entornos digitales.
PALIAR DESIGUALDADES Y CREAR ENTORNOS SEGUROS
No obstante, Bustinduy agregó que su acción se “enfoca” también en “paliar desigualdades y crear entornos seguros” y manifestó que ese es el “espíritu” del real decreto de comedores escolares en el que su ministerio está “trabajando” con el fin de “garantizar una alimentación saludable y sostenible” en los centros educativos.
Para el responsable de Consumo, ese es también el “objetivo” del real decreto de etiquetado braille que su departamento lanzó a consulta pública, abierta hasta la próxima semana, y cuyo propósito es que actividades “tan cotidianas” como hacer la compra “no supongan una barrera estructural para cientos de miles de compatriotas”.
El ministro hizo referencia, además, a la futura Ley de Consumo Sostenible, que persigue, entre otras cuestiones, garantizar la reparabilidad de los productos, luchar contra el greenwashing y “facilitar la transformación de nuestros modos de producir y consumir para hacerlos más racionales y sostenibles”.
Asimismo, Bustinduy recordó que la pasada navidad fue la primera en la que se aplicó “plenamente” la autorregulación de publicidad no sexista en juguetes y, si bien reconoció que los resultados “son positivos”, estimó que “nos indican que aún hay mucho margen de mejora”.
JUEGO
Por lo que respecta al área de juego, hizo hincapié en la introducción de la regulación de las cajas botín en el anteproyecto de ley de protección de menores en el entorno digital con el reto de “evitar la exposición a dinámicas de apuestas y juegos de azar desde edades tempranas”.
“Vamos a recuperar la prohibición de los bonos de bienvenida, la publicidad con famosos y en redes sociales para casas de apuestas online. Le daremos el rango de ley que ha indicado el Tribunal Supremo”, avanzó, consciente de que, en esta área, “no se puede dar pasos atrás”.
A pesar de la “complejidad del contexto”, el ministro se comprometió a “seguir avanzando en todas estas líneas” y defendió que “atajar las desigualdades que atraviesan las relaciones económicas pasa también por hacer de los derechos de las personas consumidoras verdaderos derechos de ciudadanía”.
- Te recomendamos -
