ALMERÍA, 18 (EUROPA PRESS)
Apenas apagados los ecos de la música en Escenario Playa, la programación musical de Cooltural Fest se trasladó este sábado a las seis de la tarde al Recinto de Conciertos del Ferial, dando continuidad así a una ‘continuum’ de 17 horas de música en directo ininterrumpida y preparados para disfrutar de la ‘segunda de abono’.
El festival que organiza Crash Music y el Área de Cultura, Tradiciones y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Almería contó en los escenarios principales (Fundación Music For All y Estrella Levante), por orden de intervención, con Cala Vento, Belén Aguilera, Iván Ferreiro, Dani Fernández, Amaral, La Casa Azul, La Plazuela y Ojete Calor. Mientras que el escenario ‘Cooltural Club’ (Tanqueray 0,0) contó con un elenco ‘non stop’ con dj’s y bandas como Michael Maro, Mato Mato Dj’s, The Anahit, García Picasso, Me & The Reptiles, Bita DJ y Miss Deep’in.
Cala Vento es el nombre de la banda que lideran el dúo Aleix Turón en la voz y guitarras y Joan Delgado a la voz y batería. Cuatro años después de su anterior largo, ‘Balanceo’, equilibraron su cuarto elepé, ‘Casa Linda’, que reunía la furia guitarrera del debut con las virtudes pop de las entregas siguientes, que fueron todas justamente representadas.
En una carrera cimentada con paciencia, Belén Aguilera ha ido creciendo moviéndose entre un pop de corte urbano y bailable desde que hace diez años se hiciera viral con sus versiones a voz y piano. El de este sábado fue su último concierto de esta gira, que cierra para preparar su nuevo álbum, y donde hizo un repaso a lo más esperado de su discografía, como las iniciales ‘Thelma & Louise’, la cantada a coro con el público ‘La Tirita’ o ‘PAS’.
IVÁN FERREIRO Y AMARAL, EL ARTE Y LA FURIA
No son necesarias muchas presentaciones para hablar de nombres propios que forman parte del imaginario colectivo del pop rock español desde hace más de 35 y 25 años, respectivamente. Iván Ferreiro y Amaral pusieron la sabiduría de la experiencia y la prestancia de sus infalibles directos al servicio de Cooltural Fest, firmando, sin duda, las que serán dos de las actuaciones más memorables de la edición de 2024.
El artista gallego llegaba en el marco de la gira de presentación de su magistral ‘Trinchera Pop’, donde realiza el enésimo salto sin red de su búsqueda del arte popular dentro de la música con una elegancia, peso y poso que va dando una madurez muy bien entendida. Pocas canciones quedaron por sonar y no es extraño por la capacidad de enganchar la atención desde el inicio de ‘Canciones para no escapar’, pasando por ‘Gran columpio’, ‘Pin ball’, ‘Dejar Madrid’, ‘En el alambre’ o una ‘Miss Saigon’ que derivó en un desarrolló electrónico, vigoroso y coral.
El mismo escenario recibiría pasada hora y media a otro tótem como Amaral. El dúo formado por Eva Amaral y Juan Aguirre no se guardó nada en el zurrón de una discografía nutrida y copiosa, convirtiendo su concierto en un gran acto de celebración sobre un repertorio incontestable. Empezar con la belleza pasional de ‘Sin ti no soy nada’, subirse al ‘Rompehielos’, adelanto de su próximo disco, añorar aquellos ‘Días de verano’, gritar y brincar con ‘Toda la noche en la calle’ o ‘Salta’ fueron las protagonistas del arranque de una hora y media de concierto que voló entre éxito y éxito.
Tanto, que hasta se remontó a su debut homónimo desempolvando la bisoña ‘No sé qué hacer con mi vida’ o el ejercicio lírico de ‘Estrella de mar’. En la línea de la urgencia y el punto de inflexión que modulan los momentos vitales más decisivos, la voz de Amaral siguió luciendo esplendorosa en las reafirmantes ‘Hoy es el principio del final’, ‘Salir corriendo’ o ‘Nuestro tiempo’ y con ese lloro desencantado inconfundible en declaraciones arrebatadas como ‘Moriría por vos’ o ‘Cómo hablar’, momento sublime. Con la satisfacción del deber cumplido, ‘Marta, Sebas, Guille y los demás’ y ‘El universo sobre mí’ fueron los dos gigantes karaokes postreros para una gran noche compartida entre público y artistas.
DANI FERNÁNDEZ, EL BRÍO; LA CASA AZUL, LA DISCO
Con poco más de treinta años (cumplirá los 33 en diciembre), la arrasadora popularidad de Dani Fernández ‘reconcilia’ con las viejas formas de éxito del pop rock. Madera de rockero de autor, canciones orgánicas donde lucen las guitarras, primero lució la eterna figura cornúpeta de la Gibson SG, después la belleza sencilla de la Fender Stratocaster, donde no hay recursos de moda ni efectos innecesarios. Con una llaneza y sinceridad en cada tema, el turno de Dani Fernández se situó entre Iván Ferreiro y Amaral, una simbólica posición que quizá puede presagiar que él sea ‘el veterano’ de aquí a unos cuantos lustros.
Desde luego materia y respaldo del público tiene para ello. ‘Dile a los demás’, ‘Disparos’, la reciente ‘Criminal’ o ‘Grace’ abrieron la veda con decisión y con brío. Momentos de intensidad como la creciente y desgarrada ‘Artificial’ que sucedió a ‘Sin vergüenza’ o la hermosa ‘Solo tienes que avisar’, canción dedicada a su hija cuando no había nacido. Al ritmo de ‘Bailemos’ concluyó un concierto que dejó flotando en el aire papeles de colores y esperanza de futuro.
El mismo escenario recibiría después de Amaral a La Casa Azul, otro clásico de los últimos 25 años con su música híbrida entre el indie y la electrónica. Liderados por un siempre dinámico Guille Milkyway, las alas del synthpop se extendieron con ritmos juguetones y amables desde los iniciales ‘No hay futuro’ o ‘No más Myolastan’, pasando por ‘Hasta perder el control’ o la ‘speedica’ ‘Ataraxia’. Clara evocación constante al mundo de Daft Punk, como ‘El momento’ o la multidireccional y más reciente ‘Prometo no olvidar’.
Las poppy y añejas ‘Galletas’ y ‘Superguay’ acercaron al momento más esperado del concierto. Aunque todavía quedaba más por bailar al ritmo de ‘Entra en mi vida’ y ‘La fiesta universal’. Entonces sí, llegó ‘La revolución sexual’ con toda su jovialidad desbordante.
LA PLAZUELA Y OJETE CALOR, LA DESPEDIDA
En la variedad de sonidos propuesta para la sesión de sábado en Cooltural Fest, La Plazuela tenía sin duda el honor de ser la más flamenca de todas. Su mezcla de raíz con el nuevo funk, la música de club de los setenta, algo del de Caño Roto y una fina electrónica lució al compás en un concierto repleto de melismas y plasticidad tanguera como ‘La primerica helá’ que sucedió a la inicial ‘La ida’, con mención especial a los músicos y los coros que bien acompañan a Manuel Hidalgo y Luis Abril.
En muy pocos años se han hecho un sitio con esa combinación de cantes y electrónica de forma más estilizada que Califato 3/4 o más accesible que la que despacha en territorios metaleros Fausto Taranto. Esa accesibilidad más cercana a un público más amplio se plasma en temas como ‘Placeta de la charca’, las síncopas seudo reggae de ‘Principios del XX’, ‘Péiname Juana’, “Antigua judería’ o ‘Realejo beach’. Llegando al final, el trance moruno de ‘Tangos de copera’ refulgió en la madrugada.
Tras llenar salas de todo el país reuniendo a más de 100.000 ‘subnopoppers’ y darse un garbeo por distintos festivales los últimos años, Ojete Calor, el dúo compuesto por Carlos Areces y Aníbal Gómez están inmersos en su nueva gira, ‘Vota UPyD Summer Tour 2024’ que lleva su histriónico y demencial sentido del humor con una comicidad actoral a prueba de ridículos, enfocando los clichés más absurdos del día a día, desde ‘0,60’ a ‘Extremismo mal’ o ‘Opino de que’ del primer bloque. Pero es tras el tremendo popurrí donde se cuelan cosas como ‘Coco Guagua’, ‘Todos contra el fuego’, ‘Verano azul’ o ‘Mi amigo Félix’ cuando llega la traca final.
La versión de ‘Freed from desire’ de Gala convertida en ‘Vete a tu casa’, la versión suprema del ‘Agapimú’ de Ana Belén, la generacional ‘Viejoven’ o ‘Tonta gilipó’ dejaron una sensación extasiante para el público que aguantó hasta el pitido final.
- Te recomendamos -