SEVILLA, 29 (EUROPA PRESS)
La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía ha valorado la nueva Estrategia de Alzheimer y otras demencias neurodegenerativas, un plan integral destinado a abordar “de manera efectiva y coordinada” los retos que plantean estas enfermedades y que se ha realizado en colaboración con la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, así como con la Confederación Andaluza de Alzheimer y otras Demencias para mejorar la calidad de vida de los afectados, sus familias y cuidadores.
Las demencias neurodegenerativas son “enfermedades implacables” que afectan a la memoria y a otras zonas cognitivas del cerebro, así como a la autoestima e independencia de quienes las padecen. Además, generan una gran preocupación en los familiares y cuidadores debido a la progresiva pérdida de autosuficiencia del enfermo. Según datos recogidos por la Junta en una nota, se estima que alrededor de 800.000 personas viven con algún tipo de demencia en España –120.000 en Andalucía, casi un 1,5% de su población. En cuanto a su distribución por edad, ronda el 0,05% las personas que se encuentran entre los 40 y 65 años, el 1,07% entre los 65 y 69 años, y aumenta hasta situarse en el 39,2% entre los mayores de 90 años.
Asimismo, la demencia constituye una “prioridad sanitaria global”, que ha llevado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a recomendar la elaboración de planes nacionales de actuación. Según datos facilitados por la Junta, se estima que cada año surgen “entre 150 y 200 nuevos casos de enfermedad de Alzheimer presenil en menores de 65 años”. También se prevé que cada 20 años se duplique el número de personas afectadas, por lo que es “imprescindible el diagnóstico precoz” de estas patologías para enfrentar la enfermedad desde las primeras fases.
El Plan Integral de Alzheimer y otras Demencias de Andalucía busca abordar las deficiencias actuales a la enfermedad que pueda haber mediante una estrategia integral y colaborativa. Para ello, se realizará un análisis de la situación, una planificación operativa a través de líneas estratégicas y el establecimiento de indicadores de evaluación y seguimiento. En cuanto a sus líneas estratégicas, seguirá la promoción de la salud cognitiva, sensibilización y adaptación de la sociedad para impulsar un cambio cultural y favorecer así la permanencia de las personas con demencia en su entorno cercano, así como la mejora de la atención, coordinación y continuidad asistencial, que promueve la salud cognitiva en todas las etapas de la vida; y mejorar los procesos asistenciales.
Con la nueva estrategia, la Junta pretende reconocer y apoyar a los cuidadores, por lo que se crearán protocolos para la prevención y abordaje de desapariciones. También la promoción del buen trato y coordinación intersectorial para evitar la soledad no deseada en las personas afectadas; y la formación e investigación, con el objetivo de desarrollar competencias profesionales específicas, así como fomentar la investigación en patogénesis, carga epidemiológica y nuevas herramientas de tratamiento.
Entre las medidas concretas, destacan la ‘Línea Alzheimer’, que trata sobre 24 horas de información telefónica a los afectados de “carácter divulgativo”; la detección precoz del deterioro cognitivo mediante biomarcadores específicos en líquido cefalorraquídeo, y la puesta en marcha de una campaña divulgativa para la detección precoz. Con estas acciones, el Gobierno andaluz busca “mejorar la atención y el tratamiento, así como concienciar a la sociedad sobre la importancia de un diagnóstico temprano”.
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